Salmón engendró, de Rajab, a Booz. Booz engendró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé,
Josué 6:25 - Biblia Castilian 2003 Josué perdonó la vida a Rajab, la meretriz, y a la casa de su padre, con todo lo que pose an, y ella vivió en medio de Israel hasta el d a de hoy, por haber escondido a los emisarios que Josué hab a enviado para explorar Jericó. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía; y habitó ella entre los israelitas hasta hoy, por cuanto escondió a los mensajeros que Josué había enviado a reconocer a Jericó. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que Josué le perdonó la vida a la prostituta Rahab y a los parientes que estaban en su casa, porque ella escondió a los espías que él había enviado a Jericó. Y Rahab vive con los israelitas hasta el día de hoy. Biblia Católica (Latinoamericana) Josué dejó con vida a Rahab la prostituta y a la familia de su padre con todo lo que le pertenecía. Esta ha vivido en Israel hasta el día de hoy, porque ocultó a los espías que Josué había enviado para que exploraran Jericó. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Josué preservó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre y a todos los suyos. Y ella habita en medio de Israel hasta este día, por cuanto escondió a los emisarios que Josué envió a espiar Jericó.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Josué perdonó la vida a Rajab, la meretriz, y a la casa de su padre, con todo lo que poseían, y ella vivió en medio de Israel hasta el día de hoy, por haber escondido a los emisarios que Josué había enviado para explorar Jericó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía: y habitó ella entre los israelitas hasta hoy; por cuanto escondió los mensajeros que Josué envió a reconocer a Jericó. |
Salmón engendró, de Rajab, a Booz. Booz engendró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé,
Por la fe Rajab, la prostituta, no pereció con los incrédulos, ya que hab a dado hospitalidad a los esp as.
Lo mismo Rajab, la prostituta, ¿no se justificó por las obras al recibir a los mensajeros y al hacerlos salir por otro camino?
Josué, hijo de Nun, envió secretamente desde Sit n dos esp as con esta orden: 'Id a explorar el pa s, y más en especial Jericó'. Fueron, pues, entraron en casa de una meretriz, por nombre Rajab, y se hospedaron all.
de esta forma: cuando entremos en el pa s, atarás este cordón de hilo escarlata a la ventana por donde nos has descolgado, y reunirás contigo en casa a tu padre, a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre.
Pero la mujer tomó a los dos hombres, los escondió y dijo luego: 'Es cierto que han llegado a mi casa unos hombres, pero yo no sab a de dónde eran.
Pero ella los hab a hecho subir a la azotea y los hab a escondido bajo unos haces de lino que hab a dispuesto en la azotea.
Josué erigió doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde hab an encontrado suelo firme los pies de los sacerdotes portadores del arca de la alianza, y all están hasta el d a de hoy.