Josué 24:27 - Biblia Castilian 2003 Josué dijo a todo el pueblo: 'Mirad: esta piedra servirá de testigo contra vosotros, pues ella ha escuchado todas las palabras que Yahveh os ha dicho; y también servirá de testigo contra vosotros, para que no reneguéis de vuestro Dios'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras que Jehová nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Josué le dijo a todo el pueblo: —Esta piedra escuchó todo lo que el Señor nos dijo. Será un testigo en contra de ustedes si no cumplen lo que le prometieron a Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Josué dijo entonces al pueblo: 'Esta piedra atestiguará en contra de ustedes, porque escuchó todas las palabras que Yavé pronunció delante de nosotros. Servirá como testigo en contra de ustedes, para impedirles que renieguen de su Dios'. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra será testigo contra nosotros, pues ella ha oído todas las palabras que YHVH nos ha dicho. Será, pues, testigo contra vosotros para que no reneguéis de vuestro Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Josué dijo a todo el pueblo: 'Mirad: esta piedra servirá de testigo contra vosotros, pues ella ha escuchado todas las palabras que Yahveh os ha dicho; y también servirá de testigo contra vosotros, para que no reneguéis de vuestro Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras de Jehová que Él nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios. |
no sea que, saciado, me desv e y diga: '¿Quién es Yahveh?'. O que, por la indigencia, robe y profane el nombre de mi Dios.
Escucha, cielo; atiende, tierra que habla Yahveh: hijos crié y eduqué, y ellos se rebelaron contra m.
prevaricar y renegar de Yahveh, apartarnos de seguir a nuestro Dios, tratar de opresión y rebeld a, concebir y musitar palabras mentirosas;
Pues la piedra gritará desde el muro, y la madera le hará coro desde las vigas.
sino un mes entero: hasta que os salga por las narices y os dé asco, por haber menospreciado a Yahveh, que está en medio de vosotros, y por haberos lamentado ante él, diciendo: '¿Por qué hemos salido de Egipto?''.
Pero a aquel que me niegue ante los hombres, también yo lo negaré ante mi Padre que está en los cielos.
Pero él contestó: 'Yo os digo que, si éstos se callan, gritarán las piedras'.
Llamo hoy por testigos contra vosotros al cielo y tierra de que te pongo delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia,
'Ahora, pues, escribid este cántico; ensé aselo a los israelitas, ponlo en su boca, para que este cántico me sirva de testimonio contra los israelitas,
cuando le alcancen muchos males y aflicciones, este cántico dará testimonio contra ellos, pues no caerá en olvido en la boca de sus descendientes. Porque yo conozco los propósitos que se forja hoy, aun antes de que lo introduzca en el pa s que le promet bajo juramento'.
'Tomad este libro de la ley y ponedlo al lado del arca de la alianza de Yahveh, vuestro Dios, para que esté all como testimonio contra ti.
O d, cielos, que voy a hablar yo; y tú, tierra, escucha las palabras de mi boca.
yo pongo hoy por testigos contra vosotros al cielo y a la tierra de que desapareceréis rápidamente de la tierra por cuya posesión vais a pasar el Jordán, y no se prolongarán en ella vuestros d as, porque seréis enteramente destruidos.
Profesan conocer a Dios, pero con sus obras lo niegan: son seres abominables, rebeldes e incapaces de nada bueno.
Los rubenitas y los gaditas, por su parte, denominaron al altar 'testimonio', porque 'servirá entre nosotros de testimonio de que Yahveh es Dios'.
'Conozco tus obras. Mira que he dejado ante ti una puerta abierta que nadie puede cerrar; porque, aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra y no has negado mi nombre.
Tomó entonces Samuel una piedra, la erigió entre Mispá y Yesaná y la llamó Eben Haézer, diciendo: 'Hasta aqu nos ha prestado auxilio Yahveh'.