As que Jehú hizo matar a todos los que quedaban de la casa de Ajab en Yizreel: a todos sus magnates, a sus familiares y a sus sacerdotes, sin dejar ni un solo superviviente.
Josué 10:30 - Biblia Castilian 2003 Yahveh la entregó también, con su rey, en manos de Israel, que la pasó a filo de espada con todas las personas que en ella hab a, sin dejar supervivientes. Y trató a su rey como hab a tratado al de Jericó. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y Jehová la entregó también a ella y a su rey en manos de Israel; y la hirió a filo de espada, con todo lo que en ella tenía vida, sin dejar nada; e hizo a su rey de la manera como había hecho al rey de Jericó. Biblia Nueva Traducción Viviente Allí también el Señor les entregó la ciudad con su rey. Mató a todos sus habitantes sin dejar a nadie con vida. Luego Josué mató al rey de Libna, lo mismo que había hecho con el rey de Jericó. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé puso la ciudad y a su rey en manos de Israel. La pasó a cuchillo como también a todos sus habitantes, sin dejar escapar a nadie, y trató a su rey como había tratado al rey de Jericó. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH también la entregó en manos de Israel, a ella y a su rey, y la hirió a filo de espada con toda persona que había en ella, sin quedar sobreviviente; e hizo a su rey como había hecho al rey de Jericó. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh la entregó también, con su rey, en manos de Israel, que la pasó a filo de espada con todas las personas que en ella había, sin dejar supervivientes. Y trató a su rey como había tratado al de Jericó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová la entregó también a ella y a su rey en manos de Israel; y la hirió a filo de espada, con todas las almas que había en ella, sin quedar nada; e hizo a su rey de la manera que había hecho al rey de Jericó. |
As que Jehú hizo matar a todos los que quedaban de la casa de Ajab en Yizreel: a todos sus magnates, a sus familiares y a sus sacerdotes, sin dejar ni un solo superviviente.
entonces, cuando el pa s haya sido sometido ante Yahveh, podréis volveros, quedaréis libres de responsabilidad para con Yahveh y para con Israel, y tendréis esta tierra en propiedad ante Yahveh.
Pero Yahveh, nuestro Dios, nos lo entregó, y lo derrotamos, a él, a sus hijos y a todo su ejército.
y Yahveh, tu Dios, te las haya entregado y tú las hayas derrotado, las darás al anatema. No pactarás alianza con ellas ni les tendrás compasión. No emparentarás con ellas dando tus hijas a sus hijos ni tomando sus hijas para tus hijos,
Aquel d a Josué conquistó Maquedá y la pasó al filo de espada, como a su rey; y los entregó al anatema con todas las personas que en ella hab a, sin dejar supervivientes. Trató al rey de Maquedá como hab a tratado al de Jericó.
Pasó después Josué, y con él todo Israel, de Libná a Laquis, la asedió y la atacó.
Se apoderó Josué de todos estos reinos y de todos sus reyes; los mató a filo de espada y los entregó al anatema, como hab a dispuesto Moisés, siervo de Yahveh.
Cuando Israel acabó de matar a todos los habitantes de Ay en la campi a, en el desierto, hasta donde éstos los hab an perseguido, y cuando todos hab an ca do a filo de espada hasta su total exterminio, se volvieron los israelitas hacia Ay y la pasaron también a filo de espada.
Al rey de Ay lo colgó de un árbol hasta el atardecer; pero a la puesta del sol mandó Josué que descolgaran del árbol el cadáver. Luego lo arrojaron a la entrada de la puerta de la ciudad y echaron sobre él un gran montón de piedras, que subsiste hasta el d a de hoy.
También los habitantes de Gabaón supieron lo que hab a hecho Josué con Jericó y Ay