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Jeremías 7:30 - Biblia Castilian 2003

Porque los hijos de Judá han hecho lo que es malo a mis ojos - oráculo de Yahveh -, y han puesto sus dolos en el templo sobre el cual se invoca mi nombre, profanándolo.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Porque los hijos de Judá han hecho lo malo ante mis ojos, dice Jehová; pusieron sus abominaciones en la casa sobre la cual fue invocado mi nombre, amancillándola.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»La gente de Judá ha pecado ante mis propios ojos —dice el Señor—. Han puesto sus ídolos abominables precisamente en el templo que lleva mi nombre, y así lo han profanado.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Sí, los hijos de Judá han hecho lo que a mí no me gusta, dice Yavé. Han instalado sus ídolos en el templo, que lleva mi Nombre, para profanarlo;'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Por cuanto los hijos de Judá han hecho lo malo ante mis ojos, dice YHVH, han puesto sus ídolos detestables en la Casa sobre la cual es invocado mi Nombre, para profanarla,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Porque los hijos de Judá han hecho lo que es malo a mis ojos -oráculo de Yahveh-, y han puesto sus ídolos en el templo sobre el cual se invoca mi nombre, profanándolo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque los hijos de Judá han hecho lo malo ante mis ojos, dice Jehová; pusieron sus abominaciones en la casa sobre la cual mi nombre es invocado, amancillándola.

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Lòt tradiksyon



Jeremías 7:30
20 Referans Kwoze  

Restauró los lugares altos que su padre, Ezequ as, hab a demolido; erigió altares a Baal; construyó una aserá como la que hab a hecho Ajab, rey de Israel; se postró ante todo el ejército del cielo y le rindió culto.


Erigió también altares en el templo de Yahveh, del que Yahveh hab a dicho: 'Pondré mi nombre en Jerusalén'.


Colocó el dolo de la aserá que se hab a fabricado en el templo del que Yahveh, hab a dicho a David y a Salomón, su hijo: 'En este templo, y en Jerusalén, la que yo escog de entre todas las tribus de Israel, estableceré mi nombre para siempre.


Demolió los altares que hab a en la terraza de la cámara alta de Ajaz, erigidos por los reyes de Judá, as como los altares que hab a erigido Manasés en los dos patios del templo de Yahveh; los sacó de all, los redujo a polvo y arrojó el polvo al torrente Cedrón.


Retiró del templo de Yahveh los dioses extranjeros, el dolo y todos los altares que él mismo hab a edificado en el monte del templo de Yahveh y en Jerusalén, y los arrojó fuera de la ciudad.


Restauró los lugares altos que su padre, Ezequ as, hab a demolido; erigió altares a los baales, reconstruyó aserás, se postró ante todo el ejército del cielo y le rindió culto.


Además, colocó la imagen del dolo que hab a fabricado en el templo de Dios, del que Dios hab a dicho a David y a su hijo Salomón: 'En este templo, y en Jerusalén, la que yo escog de entre todas las tribus de Israel, estableceré mi nombre para siempre.


también yo elijo sus ultrajes y traeré sobre ellos todo lo que temen, pues llamé y nadie respondió, hablé y no me escucharon; hicieron lo malo a mis ojos y lo que no me agrada eligieron'.


Por eso quiero pagar su iniquidad y su pecado con el doble, porque han profanado mi pa s con los cadáveres de sus dolos y han llenado mi heredad con sus abominaciones.


Profetas y sacerdote son imp os, en mi propia casa encontré su maldad - oráculo de Yahveh -.


Pusieron sus abominaciones en el templo sobre el cual se invoca mi nombre, profanándolo,


y construyeron los lugares altos de Baal en el valle de Ben Hinón, para ofrecer a sus hijos y a sus hijas a Mólec - cosa que no les mandé, ni se me vino a las mientes que cometieran tal abominación -, haciendo pecar as a Judá.


De sus bellas alhajas hicieron alarde y fabricaron con ellas sus imágenes, sus dolos abominables; por eso se las convertiré en estiércol.


Alargó una especie de mano y me asió por un mechón de los pelos de la cabeza; entonces el esp ritu me elevó entre la tierra y el cielo y me llevó, en visiones divinas, a Jerusalén, a la entrada de la puerta interior que mira al norte, donde estaba el emplazamiento del dolo del celo que provoca los celos.


'Tropas enviadas por él profanarán el santuario y la ciudadela, abolirán el sacrificio perpetuo y pondrán all la abominación de la desolación.


Concertará una alianza con muchos durante una semana; y en la mitad de la semana suprimirá el sacrificio y la oblación. Pondrá sobre el ala del templo la abominación de la desolación, hasta que la ruina decretada se desplome sobre el devastador.'