Jeremías 51:14 - Biblia Castilian 2003 Yahveh Sebaot lo ha jurado por s mismo: '¡Aunque yo te llene de hombres como de langostas, entonarán contra ti el grito de guerra!'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Jehová de los ejércitos juró por sí mismo, diciendo: Yo te llenaré de hombres como de langostas, y levantarán contra ti gritería. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor de los Ejércitos Celestiales hizo este voto y lo juró por su propio nombre: «Tus ciudades se llenarán de enemigos, como campos plagados de langostas, y cantarán victoria sobre ti». Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé de los Ejércitos lo ha jurado por sí mismo: Te llenaré de hombres tan numerosos como langostas, que lanzarán gritos de guerra contra ti. La Biblia Textual 3a Edicion YHVH Sebaot ha jurado por sí mismo: Aunque tu muchedumbre sea más que la langosta, Sobre ti alzarán el grito de victoria.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh Sebaot lo ha jurado por sí mismo: '¡Aunque yo te llene de hombres como de langostas, entonarán contra ti el grito de guerra!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jehová de los ejércitos juró por sí mismo, diciendo: Yo te llenaré de hombres como de langostas, y levantarán contra ti gritería. |
Pero escuchad la palabra de Yahveh, jud os todos que habitáis en el pa s de Egipto: mirad: yo juro por mi gran nombre - dice Yahveh - que en todo el pa s de Egipto no será pronunciado más mi nombre por boca de hombre alguno de Judá, diciendo: '¡Por vida del Se or Yahveh!'.
talan su bosque - oráculo de Yahveh -; pues son innumerables, s, más numerosos que langostas; no tienen número.
Porque he jurado por m mismo - oráculo de Yahveh - que Bosrá se convertirá en horror, oprobio, ruina y maldición, y todas sus ciudades se convertirán en ruinas perpetuas'.
dad alaridos frente a ella en derredor. Ella tiende su mano; sus habitantes se desploman, se derrumban sus murallas. Es la venganza de Yahveh; vengaos de ella. Como ella hizo, hacedle a ella.
Izad bandera en la tierra, tocad trompeta en las naciones, convocadlas para la guerra santa contra ella, convocad contra ella a los reinos - Ararat, Minn y Asquenaz -, nombrad contra ella reclutadores, lanzad caballos como hirsutas langostas.
Os compensaré por los a os en que os devoraron el saltamontes y la langosta, la caballeta y el grillo, mi gran ejército que envié contra vosotros.
El Se or Yahveh lo jura por s mismo - oráculo de Yahveh, Dios Sebaot -: 'Aborrezco el orgullo de Jacob, detesto sus palacios; entregaré la ciudad y cuanto hay en ella'.
Efectivamente, cuando Dios hizo la promesa a Abrahán, no teniendo otro mayor por quien jurar, juró por s mismo,
Porque ellos sub an con sus ganados y sus tiendas; llegaban tan numerosos como langostas, pues ellos y sus camellos eran innumerables. Ven an al pa s para devastarlo.