As no serán como sus padres, gente rebelde y sediciosa, raza sin ánimo seguro y de esp ritu infiel ante su Dios.
Jeremías 5:23 - Biblia Castilian 2003 Pero este pueblo tiene un corazón terco y rebelde; dieron media vuelta y se fueron Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 No obstante, este pueblo tiene corazón falso y rebelde; se apartaron y se fueron. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, mi pueblo tiene el corazón terco y rebelde; se alejó y me abandonó. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero este pueblo, cuyo corazón es traidor y rebelde,
me ha vuelto la espalda y se ha marchado, La Biblia Textual 3a Edicion Pero este pueblo tiene un corazón obstinado y rebelde; Han apostatado y se han ido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero este pueblo tiene un corazón terco y rebelde; dieron media vuelta y se fueron Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero este pueblo tiene un corazón falso y rebelde; se volvieron y se fueron. |
As no serán como sus padres, gente rebelde y sediciosa, raza sin ánimo seguro y de esp ritu infiel ante su Dios.
Por cuarenta a os aquella generación me disgustó, y dije: 'Un pueblo es éste de perverso corazón'. Mas ellos no aprendieron mis caminos.
¿Dónde golpearos aún si segu s rebelándoos? Toda la cabeza está enferma, todo el corazón extenuado.
Volved desde lo profundo a aquel contra quien os habéis rebelado, hijos de Israel.
Nada hay más tramposo que el corazón y está desahuciado; ¿quién podrá entenderlo?
Como guardas de un campo se han puesto en cerco contra ella, pues contra m se rebeló - oráculo de Yahveh -.
Iré, pues, a los grandes y les hablaré, porque éstos conocen el camino de Yahveh, el derecho de su Dios'. Pero son precisamente todos éstos quienes quebraron el yugo y rompieron las coyundas.
Todos ellos son perfectos rebeldes, que difunden calumnias; son cobre y hierro, todos ellos son unos corrompidos.
Mi pueblo sigue apostatando de m; aunque invocan a lo alto, nadie los levanta.
Del pecado de mi pueblo se alimentan, y a la iniquidad dirigen su apetito.
Si un hombre tiene un hijo indócil y rebelde, que no quiere escuchar la voz de su padre ni la de su madre, ni les presta atención cuando lo corrigen,
Porque yo conozco tu esp ritu rebelde y tu dura cerviz. Si hoy, todav a viviendo yo con vosotros, sois rebeldes a Yahveh, ¡cuánto más lo seréis después de mi muerte!
Mirad, hermanos, que en ninguno de vosotros se halle un corazón malvado e incrédulo que lo aparte del Dios vivo;