Y responderán: 'Porque abandonaron a Yahveh, su Dios, que sacó a sus antepasados de la tierra de Egipto, y se apegaron a dioses extra os, se postraron ante ellos y los sirvieron. Por eso Yahveh ha tra do sobre ellos tal desventura''.
Jeremías 44:23 - Biblia Castilian 2003 Puesto que habéis quemado incienso y habéis pecado contra Yahveh, y no habéis escuchado la voz de Yahveh ni habéis procedido según su ley, sus normas y sus ordenanzas, por eso os ha ocurrido esta desgracia, como sucede hoy'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque ofrecisteis incienso y pecasteis contra Jehová, y no obedecisteis a la voz de Jehová, ni anduvisteis en su ley ni en sus estatutos ni en sus testimonios; por tanto, ha venido sobre vosotros este mal, como hasta hoy. Biblia Nueva Traducción Viviente A ustedes les ocurrieron todas estas cosas horribles porque quemaron incienso a los ídolos y pecaron contra el Señor. Se negaron a obedecerlo y no han seguido sus instrucciones, sus decretos ni sus leyes. Biblia Católica (Latinoamericana) Todas las calamidades que están ustedes padeciendo ahora, han sido porque ustedes ofrecieron incienso y pecaron así contra Yavé, no haciendo caso a su palabra y no portándose de acuerdo a su Ley, a sus mandamientos y órdenes. La Biblia Textual 3a Edicion por lo mismo que ofrecisteis incienso y pecasteis contra YHVH, y no obedecisteis la voz de YHVH, ni anduvisteis en su Ley ni en sus estatutos ni en sus testimonios; por eso ha venido sobre vosotros este mal, como hasta hoy. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Puesto que habéis quemado incienso y habéis pecado contra Yahveh, y no habéis escuchado la voz de Yahveh ni habéis procedido según su ley, sus normas y sus ordenanzas, por eso os ha ocurrido esta desgracia, como sucede hoy'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque habéis quemado incienso y pecasteis contra Jehová, y no obedecisteis a la voz de Jehová, ni anduvisteis en su ley, ni en sus estatutos, ni en sus testimonios; por tanto, ha venido sobre vosotros este mal, como en este día. |
Y responderán: 'Porque abandonaron a Yahveh, su Dios, que sacó a sus antepasados de la tierra de Egipto, y se apegaron a dioses extra os, se postraron ante ellos y los sirvieron. Por eso Yahveh ha tra do sobre ellos tal desventura''.
Rechazaron sus preceptos, la alianza que hab a él pactado con sus antepasados y las amonestaciones que les hab a hecho. Se fueron tras las vanidades, haciéndose vanos ellos mismos, y tras los pueblos de alrededor, a pesar de que Yahveh les hab a mandado que no los imitaran.
Pero ellos hac an burla de los mensajeros de Dios, despreciaban sus palabras y se mofaban de sus profetas, hasta que la cólera de Yahveh contra su pueblo creció tanto que ya no hubo remedio.
¿No es eso lo que hicieron vuestros padres, por lo que nuestro Dios descargó todas estas desgracias sobre nosotros y sobre esta ciudad? ¿Queréis aumentar la cólera divina contra Israel, profanando el sábado?'.
No hab an observado el pacto del Se or y hab an rehusado andar según su ley;
Mas ellos lo tentaron, rebeldes al Alt simo, no observaron sus preceptos.
Diles, pues: 'As dice Yahveh: si no me escucháis, obrando según la ley que he puesto delante de vosotros,
Yahveh ha hecho venir y ha realizado lo que hab a predicho. Porque pecasteis contra Yahveh y no escuchasteis su voz, por eso os ha sucedido esto.
Hasta el d a de hoy no se han arrepentido ni han temido ni han caminado según mi ley y mis normas, las que puse delante de vosotros y delante de vuestros padres'.
Pero desde que cesamos de incensar a la Reina de los Cielos y de ofrecerle libaciones, carecemos de todo y hemos sido consumidos por la espada y por el hambre.
as dice Yahveh Sebaot, Dios de Israel: 'Vosotros mismos habéis visto toda la desgracia que he tra do sobre Jerusalén y sobre todas las ciudades de Judá. Miradlas: hoy son una ruina, donde no hay un solo habitante,
'El incienso que habéis quemado en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, vosotros y vuestros padres, vuestros reyes y vuestros pr ncipes y la población del pa s, ¿no lo ha recordado Yahveh y no ha pensado en ello?
por el mal que cometieron ofendiéndome, yendo a incensar y servir a otros dioses que no hab an conocido ni ellos ni vosotros ni vuestros padres.
al ofenderme con las obras de vuestras manos, por incensar a otros dioses en el pa s de Egipto, adonde habéis venido a residir, resultando as que os extermináis y os convert s en una maldición y un oprobio en todas las naciones de la tierra?
Jerusalén pecó mucho, Jet por eso quedó impura. Cuantos la honraban, la desprecian porque vieron su desnudez. También ella gime y se vuelve de espaldas.
Como está escrito en la ley de Moisés, cayó sobre nosotros toda esta calamidad, y no aplacamos la faz de Yahveh, nuestro Dios, convirtiéndonos de nuestras iniquidades y prestando atención a tu verdad.
De ninguna manera: sino que lo que sacrifican [los gentiles] a los demonios lo sacrifican, y no a Dios; y no quiero que vosotros estéis en comunión con los demonios.
¿Qué compatibilidad entre el templo de Dios y los dolos? Porque nosotros somos templo de Dios vivo, como lo dijo Dios: Habitaré y caminaré en medio de ellos; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.