Entre los hijos de los sacerdotes que hab an tomado por esposas a mujeres extranjeras se encontraban los siguientes. Entre los hijos de Josué, hijo de Josadac, y entre sus hermanos: Maas as, Eliezer, Yarib y Godol as.
Jeremías 23:10 - Biblia Castilian 2003 Porque el pa s está lleno de adúlteros, porque a causa de la maldición el pa s está triste, se han secado los oasis del desierto. Corren hacia el mal y su poder es injusto. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque la tierra está llena de adúlteros; a causa de la maldición la tierra está desierta; los pastizales del desierto se secaron; la carrera de ellos fue mala, y su valentía no es recta. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues la tierra está llena de adulterio, y está bajo una maldición. La tierra está de luto; los pastos del desierto están resecos. Todos hacen lo malo y abusan del poder que tienen. Biblia Católica (Latinoamericana) El país está repleto de adúlteros; y porque los he maldecido, el país está de duelo y se han secado los oasis del desierto. Corren para hacer el mal y se empeñan en actuar injustamente. La Biblia Textual 3a Edicion La tierra está llena de adulterios, A causa de falsos° juramentos la tierra está de luto: Los pastos del desierto se han secado, Porque la carrera° de ellos es mala, Y su poder un abuso. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque el país está lleno de adúlteros, porque a causa de la maldición el país está triste, se han secado los oasis del desierto. Corren hacia el mal y su poder es injusto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque la tierra está llena de adúlteros; por causa de la maldición la tierra está de luto; los pastizales del desierto se han secado; la carrera de ellos es mala, y su fortaleza no es recta. |
Entre los hijos de los sacerdotes que hab an tomado por esposas a mujeres extranjeras se encontraban los siguientes. Entre los hijos de Josué, hijo de Josadac, y entre sus hermanos: Maas as, Eliezer, Yarib y Godol as.
Por eso la maldición devora la tierra, y exp an la culpa los que la habitan; por eso disminuyen los habitantes y quedan hombres contados.
¡Ay de quienes arrastran la culpa con cuerdas de falsedad, y el pecado como con sogas de carreta!
la han dejado arrasada, está de luto ante m, desolada. Todo el pa s está devastado, pero nadie lo lamentaba.
De luto está Judá, y languidecen sus puertas; yacen en tierra desoladas, y el grito de Jerusalén asciende.
Porque desde el menor hasta el mayor, todos ellos andan buscando su provecho; y desde el profeta al sacerdote, todos ellos obran con enga o.
¡Cómo! ¡Conque robáis, matáis, cometéis adulterio, juráis en falso, incensáis a Baal, vais tras otros dioses que no conocéis,
Haré de Jerusalén una escombrera, una guarida de chacales; de las ciudades de Judá haré un desierto sin habitantes.
Yahveh respondió: porque abandonaron mi ley, la que yo puse delante de ellos, no oyeron mi voz ni caminaron de acuerdo con ella,
Tensan su lengua como en arco; la mentira, y no la verdad, domina en el pa s. Caminan de maldad en maldad, y a m no me conocen - oráculo de Yahveh -.
Adúlteros son todos ellos. Son como un horno encendido, que el hornero cesa de atizar desde que prepara la masa hasta que fermenta.
Devastado está el campo y la tierra de luto, porque ha sido destruida la cosecha, el mosto se ha secado y el aceite se ha perdido.
'Si una persona peca porque, habiendo sido conjurada para declarar, y siendo ella testigo por haberlo visto o sabido, no lo denunció y ha incurrido, por consiguiente, en una falta;
Sus profetas son vanidosos, impostores; sus sacerdotes profanan lo santo, quebrantan la ley.
Me llegaré a vosotros para el juicio y seré un testigo irrefutable contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran en falso, contra los que defraudan el jornal del jornalero, avasallan a la viuda y al huérfano y oprimen al forastero mostrando as que no me temen - dice Yahveh Sebaot -.
libertinos, sodomitas, traficantes de seres humanos, embusteros, perjuros, y para cuanto se oponga a la santa doctrina,
Tengan todos en alta estima el matrimonio y sea sin mancha el lecho conyugal. Pues Dios condenará a libertinos y adúlteros.
Almas adúlteras, ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemiga de Dios? El que quiera ser amigo del mundo se constituye en enemigo de Dios.