Pero Manasés extravió a Judá y a los habitantes de Jerusalén y los indujo a practicar el mal, hasta el punto de hacer cosas peores que las que hac an las naciones que Yahveh hab a exterminado delante de Israel.
Jeremías 2:33 - Biblia Castilian 2003 ¡Qué bien te las arreglas para buscar amor! Por eso hasta lo peor de los males has dirigido tus pasos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 ¿Por qué adornas tu camino para hallar amor? Aun a las malvadas enseñaste tus caminos. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Cómo maquinas y tramas para ganarte a tus amantes! ¡Hasta una prostituta veterana podría aprender de ti! Biblia Católica (Latinoamericana) Qué bien andaban tus pies en busca de amor.
Conoces todos los caminos, aun los del crimen. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Qué bien sabes tu camino para buscar amores! Por eso, aun a las malvadas has enseñado tus caminos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Qué bien te las arreglas para buscar amor! Por eso hasta lo peor de los males has dirigido tus pasos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Por qué realzas tu camino para hallar amor? Pues aun a las malvadas enseñaste tus caminos. |
Pero Manasés extravió a Judá y a los habitantes de Jerusalén y los indujo a practicar el mal, hasta el punto de hacer cosas peores que las que hac an las naciones que Yahveh hab a exterminado delante de Israel.
¿Cómo puedes decir: 'No estoy sucia, detrás de los baales no he ido?'. Mira tu conducta en el valle, reconoce lo que has hecho, joven camella, ligera y vagabunda,
¿Olvida una joven sus adornos, una novia su cinturón? Pues mi pueblo me ha olvidado innumerables d as.
Hasta en tus faldas se encuentra sangre de pobres, de inocentes, a quienes no sorprendiste en flagrante. Si, a pesar de todo eso,
¡Qué a la ligera tomas el cambiar tu camino! También de Egipto tendrás que avergonzarte, como de Asiria quedaste avergonzada.
Pero entonces yo extend mi mano contra ti, disminu tu ración y te entregué a la hostilidad de tus enemigas, las hijas de los filisteos, que se avergonzaban de tu infame conducta.
Pero no sólo no te quedaste atrás a la hora de seguir sus abominaciones sino que, como si esto fuera poco, tu conducta fue más corrompida que la de ellas.'
Pondré fin a toda su alegr a, a sus fiestas, sábados y novilunios, y todas sus solemnidades.