Tal es la suerte que da Dios al malvado, la herencia que Dios le reserva'.
Jeremías 13:25 - Biblia Castilian 2003 Ésta es tu suerte, la parte que te asigno - oráculo de Yahveh -, porque me has olvidado y has confiado en la mentira. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Esta es tu suerte, la porción que yo he medido para ti, dice Jehová, porque te olvidaste de mí y confiaste en la mentira. Biblia Nueva Traducción Viviente Esta es tu asignación, la porción que te he dado —dice el Señor—, porque ustedes me han olvidado y han puesto su confianza en dioses falsos. Biblia Católica (Latinoamericana) ése es tu premio, el salario de tu rebelión, que yo te había reservado, dice Yavé, porque a mí me echaste al olvido y te entregaste a la Mentira. La Biblia Textual 3a Edicion Ésta es tu suerte, La porción señalada por mí mismo, dice YHVH, Porque te has olvidado de mí y has confiado en la mentira. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ésta es tu suerte, la parte que te asigno -oráculo de Yahveh-, porque me has olvidado y has confiado en la mentira. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Esta es tu suerte, la porción de tus medidas de parte mía, dice Jehová; porque te olvidaste de mí, y confiaste en la mentira. |
Tal es la suerte que da Dios al malvado, la herencia que Dios le reserva'.
Sobre el imp o hace llover carbones encendidos con azufre: el viento calcinante es la parte de su copa.
Yahveh se manifiesta, lleva a cabo el proceso, en las obras de sus manos cae preso el imp o. Higgayon. Selah
Sucederá en aquel d a: menguará la gloria de Jacob, adelgazará la gordura de su cuerpo;
es cierto que habéis dicho: 'Hemos sellado alianza con la muerte, hemos hecho un pacto con el seol. El azote inundante, cuando pase, no nos alcanzará, pues tenemos la mentira por refugio y el enga o por cobijo'.
Él fue quien lo dio en suerte, su mano se lo repartió con la cuerda: para siempre lo poseerán, lo habitarán de edad en edad.
juntas sus culpas y las culpas de sus padres - dice Yahveh -, pues quemaron incienso en los montes y en los collados me ultrajaron. Mediré su merecido sobre su cabeza y les pondré su paga en su seno.
Todo hombre se queda entontecido, sin conocimiento; avergonzado de su dolo todo orfebre, porque su estatua fundida es un enga o: no tienen vida,
Pues a m me olvidó mi pueblo, incensaron a la nada. Los han hecho tropezar en sus caminos, en los antiguos senderos, para que anduvieran por veredas, por caminos no pisados;
pues dos males hizo mi pueblo: me abandonaron a m, fuente de aguas vivas, y se excavaron cisternas, cisternas agrietadas, que no retienen el agua.
¿Olvida una joven sus adornos, una novia su cinturón? Pues mi pueblo me ha olvidado innumerables d as.
¡Escuchad! En las colinas se oye el llanto y plegarias de los hijos de Israel, porque erraron su camino, olvidaron a Yahveh, su Dios.
Por eso, as dice el Se or Yahveh: 'Por haberte olvidado de m y por haberme vuelto las espaldas, carga tú ahora con tu lascivia y tus prostituciones'.'
Sus jefes juzgan por soborno, sus sacerdotes ense an por lucro, sus profetas adivinan por dinero, y se apoyan en Yahveh, diciendo: '¿No está Yahveh entre nosotros? ¡No nos sucederá nada malo!'.
No escuchó la voz, no aceptó la corrección; no conf o en Yahveh, no se acercó a su Dios.
lo castigará duramente y le asignará la misma suerte que a los hipócritas. All será el llanto y el rechinar de dientes.
Trocaron al Dios verdadero por los dioses falsos y rindieron culto y adoraron cosas creadas en lugar del Creador, el cual es bendito para siempre. Amén.