Pero Miqueas prosiguió: 'Escucha ahora el oráculo de Yahveh: he visto a Yahveh sentado en su trono. Todo el ejército del cielo estaba de pie junto a él, a su derecha y a su izquierda.
Jeremías 10:1 - Biblia Castilian 2003 Casa de Israel, escuchad la palabra que os dice Yahveh. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Oíd la palabra que Jehová ha hablado sobre vosotros, oh casa de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Escucha la palabra que el Señor te dice, oh Israel! Biblia Católica (Latinoamericana) Escucha lo que dice Yavé, pueblo de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Oíd la palabra que os dice YHVH, oh casa de Israel! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Casa de Israel, escuchad la palabra que os dice Yahveh. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Oíd la palabra que Jehová os habla, oh casa de Israel. |
Pero Miqueas prosiguió: 'Escucha ahora el oráculo de Yahveh: he visto a Yahveh sentado en su trono. Todo el ejército del cielo estaba de pie junto a él, a su derecha y a su izquierda.
Escucha, pueblo m o, que quiero yo hablar, Israel, que quiero dar testimonio contra ti: Yo soy Yahveh, tu Dios.
Escuchad la palabra de Yahveh, jefes de Sodoma; o d la ense anza de nuestro Dios, pueblo de Gomorra:
O d la palabra de Yahveh, hombres fanfarrones, gobernantes de este pueblo de Jerusalén:
As dice Yahveh, Rey de Israel, su redentor, Yahveh Sebaot: 'Soy el primero y el último, y fuera de m no hay ningún dios.
As dice Yahveh: 'No aprendáis el camino de las naciones, ni temáis las se ales del cielo, aunque las naciones las teman.
Escucha la palabra de Yahveh, casa de Jacob, y todas las familias de la casa de Israel.
Dirás: escucha la palabra de Yahveh, rey de Judá, que te sientas en el trono de David, tú, tus servidores y tu pueblo que entráis por estas puertas.
entonces, por eso, escucha la palabra de Yahveh resto de Judá: as dice Yahveh Sebaot, Dios de Israel: si de verdad tenéis intención de entrar en Egipto y entráis para residir all,
Escuchad la palabra de Yahveh, hijos de Israel, porque Yahveh viene a querellarse contra los habitantes del pa s, porque no hay en ellos ni fidelidad ni amor, ni conocimiento de Dios.
Ahora escucha la palabra de Yahveh: Tú dices: 'No profetices contra Israel ni vaticines contra la casa de Isaac'.
Por eso precisamente damos sin cesar gracias a Dios; porque cuando acogisteis la palabra de Dios que nosotros os anunciábamos, no la acogisteis como palabra humana, sino - como es en realidad - como palabra de Dios, que ejerce su acción en vosotros, los creyentes.