Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Hechos 7:9 - Biblia Castilian 2003

Los patriarcas, envidiosos de José, lo vendieron a Egipto; pero Dios estaba con él

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Los patriarcas, movidos por envidia, vendieron a José para Egipto; pero Dios estaba con él,

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

»Estos patriarcas tuvieron envidia de su hermano José y lo vendieron para que fuera esclavo en Egipto; pero Dios estaba con él

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Los patriarcas se pusieron celosos de José, hasta que lo vendieron, y fue llevado a Egipto. Pero Dios estaba con él

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Y los patriarcas, teniendo envidia° de José, se deshicieron de él vendiéndolo para Egipto.° Pero Dios estaba con él,°

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Los patriarcas, envidiosos de José, lo vendieron a Egipto; pero Dios estaba con él

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y los patriarcas, movidos de envidia, vendieron a José para Egipto; pero Dios estaba con él,

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Hechos 7:9
14 Referans Kwoze  

Favorecido por Yahveh, José alcanzó éxito en todo mientras estuvo en la casa de su se or, el egipcio.


Desde que Putifar lo nombró mayordomo de su casa y de cuanto pose a, Yahveh bendijo, por consideración a José, la casa del egipcio. La bendición de Yahveh se extend a a todas sus posesiones, tanto en la casa como en el campo.


Él siguió diciéndoles: 'Acercaos a m '. Ellos se acercaron, y él les dijo: 'Yo soy José, vuestro hermano, el que vosotros vendisteis a los egipcios.


Por delante mandó un hombre, fue vendido José como esclavo.


no temas, que yo estoy contigo; no te asustes, que yo soy tu Dios. Te fortalezco y te ayudo, te sostengo con mi diestra salvadora.


Si pasas por las aguas, contigo estoy, si por los r os, no te anegarán; si andas por el fuego, no te quemarás y la llama no te abrasará.


¡Ánimo, pues, Zorobabel! - oráculo de Yahveh -. ¡Ánimo, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote! ¡Ánimo, pueblo todo del pa s! - oráculo de Yahveh -. ¡Manos a la obra! Porque yo estoy con vosotros - oráculo de Yahveh Sebaot -,


Pues bien sab a él que se lo hab an entregado por envidia.


El amor es paciente, el amor es benigno; no tiene envidia; no presume ni se engr e;