Luego tomé el documento de compra, el sellado - con la orden y las cláusulas - y el abierto,
Hechos 26:3 - Biblia Castilian 2003 y más siendo como eres conocedor de todas las costumbres y controversias que entre los jud os hay. Por ello te ruego que me escuches pacientemente. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Mayormente porque tú conoces todas las costumbres y cuestiones que hay entre los judíos; por lo cual te ruego que me oigas con paciencia. Biblia Nueva Traducción Viviente porque sé que usted es un experto en costumbres y controversias judías. Ahora, por favor, escúcheme con paciencia. Biblia Católica (Latinoamericana) pues tú conoces perfectamente sus costumbres y las discusiones propias de ellos. Por eso te ruego tengas la bondad de escucharme. La Biblia Textual 3a Edicion especialmente por ser° tú un experto, tanto en las costumbres como en las controversias que hay entre los judíos; por lo cual te suplico que me escuches pacientemente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y más siendo como eres conocedor de todas las costumbres y controversias que entre los judíos hay. Por ello te ruego que me escuches pacientemente. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mayormente sabiendo que tú eres conocedor de todas las costumbres y cuestiones que hay entre los judíos; por lo cual te ruego que me oigas con paciencia. |
Luego tomé el documento de compra, el sellado - con la orden y las cláusulas - y el abierto,
Han o do decir que tú ense as a todos los jud os que viven entre los gentiles a apartarse de Moisés, diciéndoles que no tienen que circuncidar a sus hijos ni vivir según lo establecido.
Respondió Pablo, cuando el procurador, con el gesto, le concedió la palabra: 'Sabiendo que llevas muchos a os de juez en esta nación, me siento animado a defender mi propia causa.
Mas, para no cansarte demasiado, te ruego nos escuches brevemente con tu probada clemencia.
Sin embargo, no sé qué escribir a mi se or acerca de él. Por eso le he hecho comparecer ante vosotros, y sobre todo ante ti, rey Agripa, con el fin de que, una vez finalizada la investigación, pueda escribir algo concreto.
'Me considero feliz, rey Agripa, al comenzar a defenderme hoy, delante de ti, de todas esas cosas de que me acusan los jud os,
Sabe de estas cosas el rey, a quien por ello hablo confiadamente, pues no puedo creer que nada de esto ignore, ya que no ha sucedido en ningún rincón.
a la cual esperan llegar nuestras doce tribus, sirviéndole continuamente noche y d a. Por razón de esta esperanza soy acusado de los jud os, oh rey.
Pasados tres d as, convocó a los principales de entre los jud os. Una vez reunidos, les dijo: 'Yo, hermanos, sin haber hecho nada contra el pueblo ni contra las costumbres patrias, fui hecho preso en Jerusalén y entregado a los romanos.
porque le hemos o do decir que ese Jesús de Nazaret destruirá este lugar y cambiará las costumbres que nos transmitió Moisés'.
Y si tengo el don de profec a y conozco todos los misterios y todo el saber; y tengo tanta fe como para mover monta as, pero no tengo amor, nada soy.
En cuanto se siente en el trono de su realeza, se procurará para su uso una copia de esta ley, a partir del original que está en poder de los sacerdotes lev ticos.