Eran en total unos doce hombres.
Eran por todos unos doce hombres.
Había unos doce hombres en total.
Eran unos doce hombres.
Y todos eran unos doce varones.
Y eran por todos unos doce varones.
Al ver el procónsul lo sucedido abrazó la fe, maravillado de la doctrina del Se or.
Pablo les impuso las manos y entonces vino sobre ellos el Esp ritu Santo, hablaban en lenguas y profetizaban.
Entró Pablo en la sinagoga y habló con entereza, por espacio de tres meses. Discut a sobre el reino de Dios e intentaba convencerlos.