Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Hebreos 3:13 - Biblia Castilian 2003

por el contrario, animaos mutuamente cada d a, mientras aquel hoy perdura, sin que ninguno de vosotros se endurezca por el enga o del pecado.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

Adviértanse unos a otros todos los días mientras dure ese «hoy», para que ninguno sea engañado por el pecado y se endurezca contra Dios.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Más bien anímense mutuamente cada día, mientras dura ese 'hoy'; que ninguno de ustedes se deje arrastrar por el pecado y llegue a endurecerse.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Antes bien, exhortaos los unos a los otros cada día, en tanto se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

por el contrario, animaos mutuamente cada día, mientras aquel hoy perdura, sin que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Hebreos 3:13
13 Referans Kwoze  

Necio es quien en s conf a, quien actúa con sabidur a será salvo.


Al que se apacienta de ceniza un corazón extraviado lo seduce. No salvará su vida, pues no dice: '¿No es mentira lo que tengo en mi diestra?'.


El orgullo de tu corazón te enga ó, tú que habitas en las hendiduras de la roca, que tienes la altura por morada, que dices en tu corazón: '¿Quién será capaz de derribarme en tierra?'.


el cual, al llegar y ver la gracia de Dios, se alegró y exhortaba a todos a permanecer con firmeza de corazón unidos al Se or,


Pues el pecado, aprovechando la ocasión, me sedujo, valiéndose del mandamiento, y por medio de él me mató.


a saber, que os despojéis, por lo que se refiere a vuestro anterior género de vida, del hombre viejo que se va corrompiendo a medida que sigue las tendencias de la seducción,


Como bien sabéis, tratábamos con vosotros uno a uno, como un padre con sus hijos,


Consolaos, pues, unos a otros con estas palabras.


Por lo tanto, animaos mutuamente y edificaos el uno al otro, como ya lo estáis haciendo.


Proclama la palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, increpa, exhorta, con toda comprensión y sin cejar en la ense anza.


Otra cosa os ruego, hermanos: que soportéis este discurso de exhortación. Después de todo, no me he extendido mucho.


Cada uno es tentado por su propio deseo, que lo atrae y lo seduce.