Sonrójanse los que adoran simulacros, los que cifran su gloria en falsos dioses: ante él los dioses todos se prosternan.
Hebreos 1:6 - Biblia Castilian 2003 Y en otro pasaje, al introducir en el mundo al primogénito, dice: Adórenlo todos los ángeles de Dios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Además, cuando trajo a su Hijo supremo al mundo, Dios dijo: «Que lo adoren todos los ángeles de Dios». Biblia Católica (Latinoamericana) Al introducir al Primogénito en el mundo, dice: Que lo adoren todos los ángeles de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y otra vez, cuando introduce° al Primogénito en el mundo, dice: Adórenlo todos los ángeles de Dios.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y en otro pasaje, al introducir en el mundo al primogénito, dice: Adórenlo todos los ángeles de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Y adórenle todos los ángeles de Dios. |
Sonrójanse los que adoran simulacros, los que cifran su gloria en falsos dioses: ante él los dioses todos se prosternan.
Este evangelio del reino será predicado en toda la tierra como testimonio para todos los pueblos. Y entonces llegará el fin.
Y la Palabra se hizo carne y puso su morada entre nosotros. Nosotros vimos su gloria, gloria como de Hijo único que viene del Padre, lleno de gracia y de verdad.
A Dios nadie lo ha visto jamás; el Hijo único, Dios, el que está en el seno del Padre, él es quien lo dio a conocer.
Porque tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único, para que ninguno de los que creen en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
Porque a los que de antemano conoció, también de antemano los destinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que éste fuera el primogénito entre muchos hermanos.
Naciones, aclamadlo a una con su pueblo, porque Dios vengará la sangre de sus siervos; tomará venganza de sus adversarios y hará la expiación por su tierra y su pueblo.'
Él es la cabeza del cuerpo, de la Iglesia; él, que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que as él tenga primac a en todo:
Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Hijo m o eres tú, hoy te he engendrado yo? ¿O también: Yo seré su padre y él será mi hijo?
Por eso, al entrar en el mundo, dice: Sacrificios y oblaciones no deseas, pero me preparaste un cuerpo;
que, después de subir al cielo, está a la diestra de Dios y le están sometidos ya ángeles, potestades y virtudes.
En esto se manifestó el amor de Dios en nosotros: en que Dios envió al mundo a su Hijo, al Unigénito, para que vivamos por él.
y de parte de Jesucristo, el testigo fidedigno, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y al que nos libró de nuestros pecados con su sangre