Tomaron entonces la túnica de José, degollaron un cabrito y empaparon la túnica en sangre.
Génesis 45:26 - Biblia Castilian 2003 al que dieron la nueva, diciéndole: '¡José está vivo y es el que gobierna en toda la tierra de Egipto!'. Jacob no se inmutó, pues no los cre a. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y le dieron las nuevas, diciendo: José vive aún; y él es señor en toda la tierra de Egipto. Y el corazón de Jacob se afligió, porque no los creía. Biblia Nueva Traducción Viviente «¡José todavía vive! —le dijeron a su padre—. ¡Y es el gobernador de toda la tierra de Egipto!». Jacob se quedó atónito al oír la noticia, y no podía creerlo. Biblia Católica (Latinoamericana) Le dieron la buena noticia: 'José vive todavía y es el que manda en todo el país de Egipto. Pero Jacob no se conmovió, pues no les creyó. La Biblia Textual 3a Edicion y le anunciaron, diciendo: ¡José aún vive, y gobierna en toda la tierra de Egipto! Pero su corazón desmayó, pues no les creía. Biblia Serafín de Ausejo 1975 al que dieron la nueva, diciéndole: '¡José está vivo y es el que gobierna en toda la tierra de Egipto!'. Jacob no se inmutó, pues no los creía. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y le dieron las nuevas, diciendo: José vive aún; y él es señor en toda la tierra de Egipto. Y el corazón de Jacob desmayó, pues no les creía. |
Tomaron entonces la túnica de José, degollaron un cabrito y empaparon la túnica en sangre.
Vinieron todos sus hijos y todas sus hijas a consolarlo; pero él estaba inconsolable y dec a: 'En duelo bajaré al seol, al lado de mi hijo'. Y su padre le lloraba.
Cuando llegaron adonde estaba Jacob, su padre, a la tierra de Canaán, le contaron todo lo que les hab a sucedido, diciéndole:
Jacob, su padre, les dijo: '¡Me vais a dejar sin hijos! José ya no existe. Simeón no está entre nosotros. Y ahora queréis llevaron a Benjam n. ¡Todas las desgracias caen sobre m !'.
Respondió Jacob: 'No bajará mi hijo con vosotros. Su hermano ha muerto y sólo me queda él. Si le sucede alguna desgracia durante vuestro viaje, har ais descender con dolor mis canas al seol '.
el uno partió de mi lado y tuve que decir: seguramente que ha sido despedazado; y no le he visto más hasta el presente.
Subieron, pues, de Egipto y llegaron a la tierra de Canaán, a Jacob, su padre,
Dijo Israel a José: 'No contaba yo con ver más tu rostro; pero Dios ha hecho que te viera a ti y también a tu descendencia'.
Y aunque él respondiese a mi llamada, yo no creer a que escuchaba mi voz.
Canto gradual. Cuando el Se or restaure la suerte de Sión, estaremos como en sue os.
Hasta las ra ces de los montes descend, los cerrojos de la tierra se cerraban por siempre sobre m. Mas tú sacaste mi vida de la fosa, Yahveh, Dios m o.
Pero a ellos estas palabras les parec an un desvar o y no les daban crédito. [
que dec an: '¡Es verdad! El Se or ha resucitado y se ha aparecido a Simón'.
No acabando ellos de creer aún de pura alegr a y llenos de admiración, les preguntó: '¿Tenéis aqu algo que comer?'.