Le hizo montar sobre la segunda carroza que ten a y pregonaban delante de él: ¡Abrek! Y as, lo puso al frente de toda la tierra de Egipto.
Génesis 41:44 - Biblia Castilian 2003 Luego dijo el Faraón a José: 'Yo soy el Faraón; sin tu permiso, nadie alzará mano ni su pie en toda la tierra de Egipto'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Faraón a José: Yo soy Faraón; y sin ti ninguno alzará su mano ni su pie en toda la tierra de Egipto. Biblia Nueva Traducción Viviente y le dijo: «Yo soy el faraón, pero nadie levantará una mano ni un pie en toda la tierra de Egipto sin tu aprobación». Biblia Católica (Latinoamericana) Dijo Faraón a José: '¡Yo soy Faraón! Sin tu consentimiento, nadie moverá mano o pie en Egipto. La Biblia Textual 3a Edicion Y Faraón dijo a José: Yo soy el Faraón, pero sin tu permiso nadie levantará mano ni pie en toda la tierra de Egipto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Luego dijo el Faraón a José: 'Yo soy el Faraón; sin tu permiso, nadie alzará mano ni su pie en toda la tierra de Egipto'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Faraón a José: Yo Faraón; y sin ti ninguno alzará su mano ni su pie en toda la tierra de Egipto. |
Le hizo montar sobre la segunda carroza que ten a y pregonaban delante de él: ¡Abrek! Y as, lo puso al frente de toda la tierra de Egipto.
Porque el jud o Mardoqueo fue el segundo después del rey Asuero. Fue grande entre los jud os y amado por sus numerosos hermanos. Buscó el bien de su pueblo y se preocupó de la paz en favor de toda su raza. (3a) Y dijo Mardoqueo: 'De Dios ha venido todo esto. (3b) Me he acordado, en efecto, del sue o que tuve referente a estos hechos, ninguno de los cuales ha dejado de cumplirse, (3c) de cómo la fuentecilla se convirtió en r o y de la abundancia que hubo de luz, de sol y de agua. El r o es Ester, a quien el rey tomó por esposa y la hizo reina. (3d) Los dos dragones somos yo y Amán. (3e) Los pueblos son los que se juntaron para acabar con el nombre de los jud os. (3f) Mi pueblo es este Israel, que clamó a Dios y fue salvado. El Se or salvó a su pueblo y él nos libró de todos estos males; Dios obró estas se ales y estos grandes prodigios, cuales nunca hubo entre los gentiles. (3g) Por eso él determinó estas dos suertes: una para el pueblo de Dios, y otra para todos los demás pueblos. (3h) Y estas dos suertes se han cumplido en la hora y en el momento oportuno, como d a de juicio se alado por Dios para todas las naciones. (3i) Dios se acordó de su pueblo e hizo justicia a su heredad. (3k) Y estos d as del mes de Adar, el catorce y el quince de este mes, serán para los jud os d as de asamblea y de alegr a y de regocijo en presencia de Dios por todas las generaciones, para siempre en su pueblo Israel. (3l) El a o cuarto del reinado de Tolomeo y Cleopatra, Dositeo, que dec a ser sacerdote y levita, y su hijo Tolomeo, trajeron la presente carta sobre los purim, de la cual afirmaron que era auténtica y que hab a sido traducida por Lis maco, hijo de Tolomeo, de la comunidad de Jerusalén.
con poder de obligar a sus magnates según su voluntad, y de ense ar sabidur a a sus ancianos.
Pero contra los israelitas ni un perro ladrará ni contra los hombres ni contra los animales, para que sepáis que Yahveh distingue entre Egipto e Israel.