El jefe de los coperos contó su sue o a José, diciéndole: 'En mi sue o ten a ante m una vid.
Génesis 40:8 - Biblia Castilian 2003 Respondieron: 'Hemos tenido un sue o, y no hay nadie que lo sepa interpretar'. Les dijo José: '¿No son cosa de Dios las interpretaciones? Vamos, contádmelo'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Ellos le dijeron: Hemos tenido un sueño, y no hay quien lo interprete. Entonces les dijo José: ¿No son de Dios las interpretaciones? Contádmelo ahora. Biblia Nueva Traducción Viviente —Anoche los dos tuvimos sueños —contestaron ellos—, pero nadie puede decirnos lo que significan. —La interpretación de los sueños es asunto de Dios —respondió José—. Vamos, cuéntenme lo que soñaron. Biblia Católica (Latinoamericana) Y le contestaron: 'Los dos hemos tenido un sueño y nos falta quien lo interprete. José les dijo: '¿No es Dios quien da el interpretar los sueños? Vamos, cuéntenme lo que soñaron. La Biblia Textual 3a Edicion Y le dijeron: Hemos soñado un sueño y no hay quien lo interprete. Entonces les dijo José: ¿Acaso no corresponden a ’Elohim las interpretaciones? Contádmelos, os ruego. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondieron: 'Hemos tenido un sueño, y no hay nadie que lo sepa interpretar'. Les dijo José: '¿No son cosa de Dios las interpretaciones? Vamos, contádmelo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ellos le dijeron: Hemos tenido un sueño, y no hay quien lo interprete. Entonces les dijo José: ¿No son de Dios las interpretaciones? Contádmelo ahora. |
El jefe de los coperos contó su sue o a José, diciéndole: 'En mi sue o ten a ante m una vid.
Respondió José al Faraón: 'El sue o del Faraón es uno solo. Dios ha manifestado al Faraón lo que va a hacer.
Pero, si hay un ángel a su lado, un solo intercesor entre mil, que muestre al hombre su deber,
Los secretos del Se or se dan al que le teme, y, para instruirle, su alianza.
Seguramente os dirán: 'Consultad a agoreros y adivinos que bisbisean y susurran. ¿No consulta un pueblo a sus dioses y acerca de los vivos a los muertos?'.
Lo que el rey pide es tan dif cil que nadie se lo puede descubrir al rey, salvo los dioses, cuya morada no está entre los hombres'.
Daniel respondió: 'El misterio que el rey desea saber no hay sabios, ni adivinos, ni magos, ni astrólogos que puedan revelárselo al rey,
pero hay un Dios en el cielo que revela los misterios, y él ha dado a conocer al rey Nabucodonosor lo que sucederá al fin de los d as. Tu sue o y las visiones de tu mente, las que tuviste mientras estabas en el lecho, son las siguientes:
El rey les dijo: 'He tenido un sue o, y mi esp ritu está turbado porque deseo comprender su sentido'.
Y tomando la palabra, le dijo a Daniel: 'Verdaderamente, vuestro Dios es el Dios de los dioses, el Se or de los reyes y el revelador de los misterios, ya que tú has sido capaz de revelar este misterio'.
El árbol creció y se hizo fuerte; su copa llegaba hasta el cielo, y se ve a desde los confines de la tierra.
Yo he o do decir de ti que puedes dar interpretaciones y resolver problemas. Si efectivamente eres capaz de leer la escritura y darme su interpretación, serás vestido de púrpura, llevarás un collar de oro al cuello y serás el tercero en el gobierno del reino'.
No; no suele hacer el Se or Yahveh cosa alguna sin revelar sus designios a sus siervos los profetas.