Esaú sintió gran odio por Jacob a causa de la bendición con que lo hab a bendecido su padre y se dijo Esaú en su corazón: 'Se acercan los d as del duelo por mi padre, y entonces mataré a mi hermano Jacob'.
Génesis 37:4 - Biblia Castilian 2003 Viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos ellos, le ten an rencor y no le dirig an la palabra. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos sus hermanos, le aborrecían, y no podían hablarle pacíficamente. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero sus hermanos lo odiaban porque su padre lo amaba más que a ellos. No dirigían ni una sola palabra amable hacia José. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus hermanos, viendo que su padre le prefería a sus otros hijos, comenzaron a odiarlo hasta tal punto que no podían conversar con él. La Biblia Textual 3a Edicion Sus hermanos, al ver que su padre lo prefería entre todos ellos,° lo aborrecían y no le podían hablar pacíficamente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos ellos, le tenían rencor y no le dirigían la palabra. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos sus hermanos, le aborrecían, y no le podían hablar pacíficamente. |
Esaú sintió gran odio por Jacob a causa de la bendición con que lo hab a bendecido su padre y se dijo Esaú en su corazón: 'Se acercan los d as del duelo por mi padre, y entonces mataré a mi hermano Jacob'.
Sus hermanos le cobraron envidia, pero su padre rumiaba aquellas palabras.
Tuvo José un sue o y lo refirió a sus hermanos, con lo que le odiaron todav a más.
pero no en Ca n y la suya. Esto irritó a Ca n sobremanera y ten a el semblante abatido.
Me consumo de gritar, mi garganta está ardiendo, y mis ojos languidecen, en la espera de mi Dios.
S; tus propios hermanos y la casa de tu padre, ellos mismos te son desleales; también ellos te critican a pleno pulmón. No te f es de ellos, aunque te den buenas palabras.
Porque hubo un tiempo en que también nosotros éramos insensatos, desobedec amos, nos extraviábamos, serv amos a deseos y placeres diversos, pasábamos nuestra vida entre malicia y envidia, odiados y odiándonos mutuamente.
Pero quien odia a su hermano, está en las tinieblas y en las tinieblas anda y no sabe adónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos.
En esto se dan a conocer los hijos de Dios y los hijos del diablo: quien no hace justicia, no es de Dios, y tampoco lo es quien no ama a su hermano.
No como Ca n, que era del Maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué lo mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.
Si alguno dice: 'Yo amo a Dios', pero odia a su hermano, es mentiroso; pues quien no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve.
Su hermano mayor, Eliab, lo oyó hablar as con los hombres y se encendió en cólera contra David, diciéndole: '¿Para qué has bajado aqu, y a quién encomendaste el peque o reba o que está en el desierto? Yo conozco tu arrogancia y la malicia de tu corazón: tú has bajado para presenciar el combate'.