Puesto que tu siervo ha hallado gracia a tus ojos, y ha sido grande el favor que me has hecho al salvar mi vida, mira que no puedo huir al monte, pues podr a alcanzarme el desastre y morir a.
Génesis 33:10 - Biblia Castilian 2003 Contestó Jacob: 'No; te lo suplico. Si gozo de tu favor, tú tomarás este don de mis manos, pues he visto tu rostro como quien ve el rostro de Dios, y me has acogido bien. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Jacob: No, yo te ruego; si he hallado ahora gracia en tus ojos, acepta mi presente, porque he visto tu rostro, como si hubiera visto el rostro de Dios, pues que con tanto favor me has recibido. Biblia Nueva Traducción Viviente —No —insistió Jacob—, si he logrado tu favor, te ruego que aceptes este regalo de mi parte. ¡Y qué alivio es ver tu amigable sonrisa! ¡Es como ver el rostro de Dios! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Jacob contestó: 'No, por favor. Si realmente me quieres, acepta el regalo que te ofrezco, pues me he presentado ante ti como ante Dios, y tú me has acogido. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Jacob dijo: ¡No, por favor! Si he hallado ahora gracia delante de tus ojos, toma el presente de mi mano, pues he visto tu rostro benévolo, y es como ver el rostro de ’Elohim. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Contestó Jacob: 'No; te lo suplico. Si gozo de tu favor, tú tomarás este don de mis manos, pues he visto tu rostro como quien ve el rostro de Dios, y me has acogido bien. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Jacob: No, yo te ruego, si he hallado ahora gracia en tus ojos, toma mi presente de mi mano, pues que he visto tu rostro, como si hubiera visto el rostro de Dios; y te has contentado conmigo. |
Puesto que tu siervo ha hallado gracia a tus ojos, y ha sido grande el favor que me has hecho al salvar mi vida, mira que no puedo huir al monte, pues podr a alcanzarme el desastre y morir a.
Jacob le preguntó: 'Revélame ahora tu nombre'. Contestó él: '¿Para qué preguntas por mi nombre?'. Y le bendijo all mismo.
Acepta, te ruego, los presentes que te he tra do, pues Dios me ha favorecido y tengo de todo'. Y tanto le insistió que se lo aceptó.
Judá le contestó: 'Aquel hombre nos advirtió categóricamente: 'No os admitiré en mi presencia si vuestro hermano no viene con vosotros'.
Cuando se aproximaban los d as de la muerte de Israel, llamó éste a su hijo José y le dijo: 'Si cuento con tu benevolencia, pon tu mano bajo mi muslo y hazme favor y lealtad: no me entierres en Egipto.
Pasados los d as del duelo, habló José a la casa del Faraón, diciéndole: 'Si gozo de vuestro favor, os ruego que comuniquéis al Faraón lo siguiente:
Pero el rey dijo: 'Que se retire a su casa y no venga a verme'. Absalón se retiró a su casa y no se presentó ante el rey.
Absalón le respondió a Joab: 'Mira, te mandé llamar para decirte: 'Ven acá, pues quiero enviarte ante el rey para que le digas de mi parte: ¿para qué he venido yo de Guesur?'. Mejor hubiera sido para m seguir all. Yo quiero ahora ver al rey. Y si yo soy culpable, que me mate'.
Respondió David: 'Está bien; haré un trato contigo. Solamente te pido una cosa: no has de venir a verme si no traes a Mical, hija de Saúl, cuando te presentes ante m '.
y suplica a Dios, que le es propicio; ve con alegr a su rostro y anuncia a los hombres su justificación;
As dice Yahveh: 'gracia encontró en el desierto un pueblo de huidos de la espada. Cuando iba Israel a su reposo
Cuidado con despreciar a uno solo de estos peque os; porque os aseguro que sus ángeles en el cielo están viendo constantemente el rostro de mi Padre celestial.
Cayó ella rostro en tierra y, postrada, le dijo: '¿Por qué he encontrado favor a tus ojos y te interesas por m, siendo yo extranjera?'.
Pero David insistió: 'Tu padre sabe muy bien que me tienes simpat a y por eso se habrá dicho: 'Que no sepa esto Jonatán, para que no se aflija'. ¡Sin embargo, por vida de Yahveh y por vida tuya, que estoy a un paso de la muerte!'.