Pero Yahveh hirió al Faraón y a su casa con grandes plagas, por causa de Saray, mujer de Abrán.
Génesis 20:17 - Biblia Castilian 2003 Rogó Abrahán a Dios; y Dios sanó a Abimélec, a su mujer y a sus siervas, para que pudieran tener hijos; Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces Abraham oró a Dios; y Dios sanó a Abimelec y a su mujer, y a sus siervas, y tuvieron hijos. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Abraham oró a Dios, y Dios sanó a Abimelec, a su esposa y a sus siervas para que pudieran tener hijos. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Abrahán oró por Abimelec, y Dios curó a Abimelec, a su esposa y a sus esclavos, a fin de que pudieran tener hijos. La Biblia Textual 3a Edicion Y Abraham oró a ’Elohim, y ’Elohim sanó a Abimelec, y a su mujer y a sus siervas, las cuales tuvieron hijos, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Rogó Abrahán a Dios; y Dios sanó a Abimélec, a su mujer y a sus siervas, para que pudieran tener hijos; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Abraham oró a Dios; y Dios sanó a Abimelec y a su esposa, y a sus siervas, y tuvieron hijos. |
Pero Yahveh hirió al Faraón y a su casa con grandes plagas, por causa de Saray, mujer de Abrán.
Ahora, pues, devuelve la mujer de este hombre, pues él es un profeta, y orará por ti, y vivirás. Si no la devuelves, sabe que de cierto morirás, tú y todos los tuyos'.
Viendo Yahveh que L a era desde ada la hizo fecunda, mientras que Raquel era estéril.
para que ofrezcan sacrificios gratos al Dios del cielo y oren por la vida del rey y la de sus hijos.
Tomad pues, siete becerros y siete carneros, acudid ante mi siervo Job y ofrecedlos por vosotros en holocausto. Mi siervo Job intercederá por vosotros y en atención a él no os castigaré por no haber hablado rectamente de m, como mi siervo Job'.
Yahveh abomina el sacrificio de los malos; pero se complace en la plegaria de los justos.
As dice Yahveh, el Santo de Israel y su modelador: '¿Me pediréis cuentas acerca de mis hijos, y sobre la obra de mis manos me daréis órdenes?
Acudió el pueblo a Moisés y le dijo: '¡Hemos pecado por haber hablado contra Yahveh y contra ti! Ruega a Yahveh que aleje de nosotros las serpientes'. Moisés intercedió por el pueblo
Y todos los profetas, desde Samuel en adelante, todos cuantos hablaron, anunciaron también estos d as.
No os afanéis por nada, sino que, en toda ocasión, en la oración y súplica, con acción de gracias, vuestras peticiones sean públicamente presentadas a Dios.
Confesaos, pues, los pecados unos a otros; orad unos por otros para ser curados. La oración asidua del justo tiene mucho poder.