Al cabo de diez a os de habitar Abrán en tierra de Canaán, tomó Saray, mujer de Abrán, a la egipcia Agar, su esclava, y se la dio por mujer a su marido, Abrán.
Génesis 16:4 - Biblia Castilian 2003 Se llegó él a Agar, que concibió y, viéndose encinta, miraba con desprecio a su ama. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y él se llegó a Agar, la cual concibió; y cuando vio que había concebido, miraba con desprecio a su señora. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que Abram tuvo relaciones sexuales con Agar, y ella quedó embarazada; pero cuando Agar supo que estaba embarazada, comenzó a tratar con desprecio a su señora, Sarai. Biblia Católica (Latinoamericana) Abram, pues, se unió a Agar, y quedó embarazada. Al notarse Agar en ese estado, comenzó a despreciar a su señora, La Biblia Textual 3a Edicion y él se llegó a Agar y concibió. Sin embargo, cuando vio que había concebido, miraba con desprecio a su señora. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se llegó él a Agar, que concibió y, viéndose encinta, miraba con desprecio a su ama. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él cohabitó con Agar, la cual concibió; y cuando vio que había concebido, miraba con desprecio a su señora. |
Al cabo de diez a os de habitar Abrán en tierra de Canaán, tomó Saray, mujer de Abrán, a la egipcia Agar, su esclava, y se la dio por mujer a su marido, Abrán.
Dijo entonces Saray a Abrán: 'Recaiga sobre ti la afrenta que se me ha hecho. Fui yo la que puse a mi esclava en tu seno; pero al verse ella encinta, me mira con desprecio. Juzgue Yahveh entre tú y yo'.
Dijo la mayor a la peque a: 'Nuestro padre es ya viejo y no queda en la tierra hombre que venga a nosotras, como se hace en todo el mundo.
Vio Sara que el hijo de Agar, la egipcia, el que ésta hab a dado a Abrahán, estaba jugando con su hijo Isaac,
Cuando el arca de Yahveh entró en la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, se asomó a la ventana y, al ver al rey David saltando y danzando delante de Yahveh, lo despreció en su corazón.
En atención a vosotros, hermanos, he aplicado estas cosas, como ejemplo, a mi propio caso y al de Apolo, para que de nosotros aprendáis lo de: 'No más de lo que está escrito', a fin de que no os infléis de vanidad, tomando partido por uno y contra otro.