Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan. En ti serán bendecidos todos los linajes de la tierra'.
Gálatas 3:16 - Biblia Castilian 2003 Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abrahán y a su posteridad. La Escritura no dice 'y a sus descendencias', como si fueran muchas; sino como si fuera una sola: Y a tu descendencia, es decir, a Cristo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios ha dado las promesas a Abraham y a su hijo. Y noten que la Escritura no dice «a sus hijos», como si significara muchos descendientes. Más bien, dice «a su hijo», y eso sin duda se refiere a Cristo. Biblia Católica (Latinoamericana) En el caso de Abrahán, las promesas eran para él y para su descendencia. La Escritura no dice para los descendientes, como si hubiera varios, sino que habla en singular: para tu descendencia, y ésta es Cristo. La Biblia Textual 3a Edicion Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abraham y a su descendencia. No dice: Y a sus descendencias, como de muchas, sino como de una: Y a tu descendencia,° la cual es el Mesías. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abrahán y a su posteridad. La Escritura no dice 'y a sus descendencias', como si fueran muchas; sino como si fuera una sola: Y a tu descendencia, es decir, a Cristo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como de muchos; sino como de uno: Y a tu simiente, el cual es Cristo. |
Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan. En ti serán bendecidos todos los linajes de la tierra'.
Se apareció Yahveh a Abrán, y le dijo: 'A tu posteridad daré yo esta tierra'. Y Abrán edificó all un altar a Yahveh que se le hab a aparecido.
Y sacándole fuera, le dijo: 'Mira al cielo y cuenta, si puedes, las estrellas'. Y a adió: 'As será tu descendencia'.
Pero dijo Dios a Abrahán: 'No te desazones por lo del ni o y tu esclava. Sigue todo lo que te dice Sara, porque aunque a través de Isaac se prolongará tu descendencia,
No se apartará de Judá el cetro, ni de entre sus pies el bastón de mando, hasta que se le ofrezca el tributo y los pueblos le obedezcan.
como hab a prometido a nuestros padres, en favor de Abrahán y su linaje para siempre'.
Vosotros sois los hijos de los profetas y de la alianza que Dios estableció con nuestros padres cuando dijo a Abrahán: Y todas las naciones de la tierra serán benditas en tu descendencia.
as nosotros, aun siendo muchos, somos un solo cuerpo en Cristo, pero, por lo que a cada uno respecta, los unos somos miembros de los otros.
Pues no fue por medio de una ley como le vino a Abrahán y a su descendencia la promesa de que él iba a ser heredero del mundo, sino mediante la justicia por la fe.
Por eso la promesa es por la fe, para que lo sea como un don y quede asegurada para todos los descendientes, no sólo para los que proceden de la ley, sino también para los que proceden de la fe de Abrahán - que es padre de todos nosotros,
Ellos son israelitas; a ellos pertenecen la adopción filial y la gloria y las alianzas y la legislación y el culto y las promesas;
Porque del mismo modo que el cuerpo, aunque tiene muchos miembros, es uno solo, pues todos los miembros del cuerpo, con ser muchos, son un solo cuerpo, as también Cristo.
¿Son hebreos? También yo. ¿Son israelitas? También yo. ¿Son del linaje de Abrahán? También yo.
Entonces, ¿a qué viene la ley? Fue a adida por razón de las transgresiones, hasta que viniera la descendencia a la que se hizo la promesa. Esta ley fue promulgada por medio de ángeles, por mano de un mediador.
Y la Escritura, previendo que Dios justificar a a los gentiles por fe, anunció de antemano a Abrahán: En ti serán bendecidos todos los linajes de la tierra.
y no permaneciendo unido a la cabeza, de la cual todo el cuerpo, por medio de junturas y articulaciones, recibe alimento y cohesión para su crecimiento de Dios.
donde no hay ya griego ni jud o; circuncisión ni incircuncisión; bárbaro, escrita, esclavo, libre; sino que Cristo es todo en todos.