Éxodo 9:34 - Biblia Castilian 2003 Cuando el Faraón vio que hab a cesado la lluvia, y también el granizo y los truenos, volvió a pecar endureciendo su corazón, tanto él como sus servidores. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y viendo Faraón que la lluvia había cesado, y el granizo y los truenos, se obstinó en pecar, y endurecieron su corazón él y sus siervos. Biblia Nueva Traducción Viviente Al ver el faraón que la lluvia, el granizo y los truenos habían cesado, él y sus funcionarios pecaron de nuevo, y el faraón se puso terco una vez más. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero, al ver Faraón que habían cesado la lluvia y el granizo, volvió a pecar, La Biblia Textual 3a Edicion Pero cuando Faraón vio que la lluvia, el granizo y los truenos habían cesado, siguió pecando y se obstinó en su corazón, tanto él como sus siervos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando el Faraón vio que había cesado la lluvia, y también el granizo y los truenos, volvió a pecar endureciendo su corazón, tanto él como sus servidores. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y viendo Faraón que la lluvia había cesado y el granizo y los truenos, perseveró en pecar, y endureció su corazón, él y sus siervos. |
Pero no se humilló ante Yahveh, como se hab a humillado su padre Manasés, sino que Amón cometió pecados aún mayores.
Se rebeló también contra el rey Nabucodonosor, que le hab a exigido juramento de fidelidad por Dios. Endureció su cerviz y se obstinó en su corazón para no convertirse a Yahveh, Dios de Israel.
Dijo Yahveh a Moisés: 'Ahora que vas a volver a Egipto, disponte a hacer delante del Faraón todos los prodigios que he puesto en tu mano; pero yo endureceré su corazón y no dejará salir al pueblo'.
Dijo Yahveh a Moisés: 'Duro es el corazón del Faraón; se ha negado a dejar partir al pueblo.
Dijeron los magos al Faraón: 'El dedo de Dios está aqu '. Pero el corazón del Faraón se endureció y, como lo hab a predicho Yahveh, no los escuchó.
Luego de salir Moisés de casa del Faraón y de la ciudad, extendió las manos hacia Yahveh, cesaron los truenos y el granizo y no cayó más lluvia sobre la tierra.
Se endureció el corazón del Faraón y no dejó partir a los israelitas, tal y como hab a predicho Yahveh por boca de Moisés.
que no se ejecuten al instante las sentencias, porque entonces el corazón de los hombres se harta de hacer el mal.
¿Por qué vais a endurecer vuestro corazón, como lo endurecieron los egipcios y el Faraón? ¿No tuvieron que dejarlos partir después que Dios los castigó?