Ahora, pues, poned vuestro corazón y vuestra alma en buscar a Yahveh, Dios vuestro, y edificad el santuario de Yahveh Dios, para que el arca de la alianza de Yahveh y los utensilios sagrados de Dios sean trasladados al templo que se ha de construir en honor del nombre de Yahveh'.
Dijo Yahveh a Moisés: 'Extiende tu mano hacia el cielo y que granice en toda la tierra de Egipto, sobre hombres y animales y sobre toda hierba del campo que hay en el pa s de Egipto'.
Aquel hombre me dijo: 'Hijo de hombre, mira y escucha atentamente y f jate bien en todo lo que te voy a mostrar, porque para hacértelo ver has sido tra do aqu. Comunica a la casa de Israel todo lo que veas'.
Él prosiguió: 'No temas, Daniel, porque desde el primer d a en que intentaste comprender y te humillaste ante tu Dios, fueron o das tus palabras, y por causa de ellas he venido yo a ti.