Éxodo 8:21 - Biblia Castilian 2003 El Faraón llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: 'Id a ofrecer sacrificios a vuestro Dios dentro de las fronteras de mi territorio'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque si no dejas ir a mi pueblo, he aquí yo enviaré sobre ti, sobre tus siervos, sobre tu pueblo y sobre tus casas toda clase de moscas; y las casas de los egipcios se llenarán de toda clase de moscas, y asimismo la tierra donde ellos estén. Biblia Nueva Traducción Viviente Si te niegas, enviaré enjambres de moscas sobre ti, tus funcionarios, tu gente y todas las casas. Los hogares egipcios se llenarán de moscas, y el suelo quedará cubierto de ellas. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón para decirles: 'Vayan a ofrecer sacrificios a Yavé, pero háganlo en este país. La Biblia Textual 3a Edicion Porque si no dejas partir a mi pueblo, he aquí enviaré una plaga de moscas contra ti, contra tus siervos, contra tu pueblo y contra tus casas, de suerte que las casas de los egipcios se llenarán de moscas junto con el suelo que pisan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El Faraón llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: 'Id a ofrecer sacrificios a vuestro Dios dentro de las fronteras de mi territorio'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque si no dejares ir a mi pueblo, he aquí yo enviaré sobre ti, y sobre tus siervos, y sobre tu pueblo, y sobre tus casas toda clase de moscas; y las casas de los egipcios se llenarán de toda clase de moscas, y asimismo la tierra donde ellos estuvieren. |
Se llenarán de langostas tus palacios, las casas de tus siervos y las de todos los egipcios, como nunca lo vieron tus padres ni tus abuelos desde el d a que empezaron a existir sobre la tierra hasta hoy'. Se retiró Moisés y salió de casa del Faraón.
Yahveh lo hizo as, y un pesado enjambre de tábanos penetró en la casa del Faraón, en la de sus servidores y en todo el pa s de Egipto, y la tierra fue asolada por los tábanos.
Respondió Moisés: 'No puede ser as, porque lo que nosotros sacrificamos a Yahveh, nuestro Dios, es abominación para los egipcios. Si ofreciéramos en presencia de los egipcios sacrificios que ellos mismos abominan, ¿no nos apedrear an?
Respondió el Faraón: 'Os dejaré partir y podréis ofrecer sacrificios a Yahveh, vuestro Dios, en el desierto, a condición de que no os alejéis demasiado. Rogad por m '.
Sucederá en aquel d a: Yahveh silbará a las moscas que hay en los confines de los r os de Egipto, y a las abejas del pa s de Asiria,