David entregó a su hijo Salomón el dise o del pórtico y de los demás edificios, de los almacenes, de las cámaras superiores, de las piezas interiores y del edificio del propiciatorio;
Éxodo 37:6 - Biblia Castilian 2003 Hizo el propiciatorio de oro puro, de dos codos y medio de largo por codo y medio de ancho. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Hizo asimismo el propiciatorio de oro puro; su longitud de dos codos y medio, y su anchura de codo y medio. Biblia Nueva Traducción Viviente Después hizo la tapa del arca —el lugar de la expiación— de oro puro. Medía un metro con quince centímetros de largo, por sesenta y nueve centímetros de ancho. Biblia Católica (Latinoamericana) Hizo el Lugar del Perdón de oro puro, de dos codos y medio de largo y codo y medio de ancho. La Biblia Textual 3a Edicion Hizo asimismo el propiciatorio de oro puro, dos codos y medio su longitud, y un codo y medio su anchura. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Hizo el propiciatorio de oro puro, de dos codos y medio de largo por codo y medio de ancho. Biblia Reina Valera Gómez (2023) E hizo el propiciatorio de oro puro; su longitud era de dos codos y medio, y su anchura de un codo y medio. |
David entregó a su hijo Salomón el dise o del pórtico y de los demás edificios, de los almacenes, de las cámaras superiores, de las piezas interiores y del edificio del propiciatorio;
la tienda del encuentro, el arca del testimonio, el propiciatorio que está encima y todos los objetos de la tienda,
y los introdujo por las anillas de los lados del arca, para poder transportarla.
Modeló a golpe de martillo dos querubines de oro para los dos extremos del propiciatorio:
al que Dios públicamente presentó como medio de expiación por su propia sangre, mediante la fe, a fin de mostrar su justicia al pasar por alto los pecados cometidos anteriormente,
Pero cuando vino la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo la ley,
el cual se entregó por nosotros, para rescatarnos de toda iniquidad y para purificarnos, haciendo de nosotros un pueblo que fuera su patrimonio, dedicado a buenas obras.
Encima del arca estaban los querubines de gloria, cubriendo con su sombra el propiciatorio. Pero no es el momento de entrar en detalles.
Él es sacrificio de purificación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.