Pero también a la nación a la que ellos habrán servido la he de juzgar yo, después de lo cual saldrán con muchos bienes.
Éxodo 3:22 - Biblia Castilian 2003 sino que cada mujer pedirá prestados a su vecina y a la inquilina de su casa objetos de plata, de oro y vestidos, que pondréis a vuestros hijos y a vuestras hijas y as despojaréis a los egipcios'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 sino que pedirá cada mujer a su vecina y a su huéspeda alhajas de plata, alhajas de oro, y vestidos, los cuales pondréis sobre vuestros hijos y vuestras hijas; y despojaréis a Egipto. Biblia Nueva Traducción Viviente Toda mujer israelita pedirá a sus vecinas egipcias y a las mujeres extranjeras que vivan con ellas toda clase de objetos de plata y de oro, y prendas costosas. Con estos vestirán a sus hijos e hijas. Así despojarán a los egipcios de sus riquezas. Biblia Católica (Latinoamericana) Cada mujer pida a su vecina o a la persona que comparte su casa objetos de plata y oro y también vestidos; sus hijos e hijas se los pondrán, y así dejarán sin nada a los egipcios. La Biblia Textual 3a Edicion sino que cada mujer pedirá a su vecina y al huésped de su casa objetos de plata, objetos de oro y vestidos, y los pondréis sobre vuestros hijos e hijas, y así despojaréis a los egipcios.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 sino que cada mujer pedirá prestados a su vecina y a la inquilina de su casa objetos de plata, de oro y vestidos, que pondréis a vuestros hijos y a vuestras hijas y así despojaréis a los egipcios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) sino que cada mujer pedirá prestado a su vecina, y a la que vive en su casa, joyas de plata, y joyas de oro y vestiduras; y las pondréis sobre vuestros hijos y sobre vuestras hijas; y despojaréis a los egipcios. |
Pero también a la nación a la que ellos habrán servido la he de juzgar yo, después de lo cual saldrán con muchos bienes.
Luego el criado sacó objetos de plata y oro, y vestidos, y se lo dio todo a Rebeca. Entregó también ricos presentes a su hermano y a su madre.
Entonces los sacó, con plata y oro, sin que hubiera una falta entre sus tribus.
Habla, pues, al pueblo para que cada hombre pida a su vecino y cada mujer a su vecina objetos de plata y oro'.
La herencia del bueno pasa a sus nietos, la fortuna del pecador es para el justo.
¡Ay de ti, devastador, que no has sido devastado, traidor a quien no han traicionado! Cuando termines tú de devastar, serás devastado; cuando acabes tú de traicionar, te habrán traicionado.
No tendrán que acarrear le a del campo ni tendrán que ir a recogerla en los bosques, porque encenderán el fuego con las armas. Depredarán a sus depredadores y saquearán a sus saqueadores - oráculo del Se or Yahveh.'