Entregará, pues, a Israel, a causa de los pecados que cometió Jeroboán y de los que hizo cometer a Israel''.
Éxodo 23:33 - Biblia Castilian 2003 No habitarán más en tu tierra, no sea que te induzcan a pecar contra m; pues tú rendir as culto a sus dioses y caer as en un lazo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 En tu tierra no habitarán, no sea que te hagan pecar contra mí sirviendo a sus dioses, porque te será tropiezo. Biblia Nueva Traducción Viviente Ninguno de ellos deberá vivir en tu tierra, porque te harán pecar contra mí. Si sirves a sus dioses, quedarás apresado en la trampa de la idolatría». Biblia Católica (Latinoamericana) No habitarán en tu tierra, no sea que te lleven a servir sus dioses y a pecar contra mí: eso sería tu ruina. La Biblia Textual 3a Edicion No habitarán en tu tierra, no sea que te hagan pecar contra mí cuando sirvas a sus dioses, lo cual ciertamente te será por trampa. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No habitarán más en tu tierra, no sea que te induzcan a pecar contra mí; pues tú rendirías culto a sus dioses y caerías en un lazo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En tu tierra no habitarán, no sea que te hagan pecar contra mí sirviendo a sus dioses: porque te será de tropiezo. |
Entregará, pues, a Israel, a causa de los pecados que cometió Jeroboán y de los que hizo cometer a Israel''.
Pero Manasés extravió a Judá y a los habitantes de Jerusalén y los indujo a practicar el mal, hasta el punto de hacer cosas peores que las que hac an las naciones que Yahveh hab a exterminado delante de Israel.
Los servidores del Faraón le dijeron: '¿Hasta cuándo ese hombre va a ser para nosotros un lazo de ruina? Deja partir a esa gente, y que den culto a Yahveh, su Dios. ¿Ignoras aún que Egipto está pereciendo?'.
No te postrarás delante de sus dioses ni los servirás, ni obrarás según su conducta, sino que destruirás sus dioses y arrasarás sus estelas.
Guárdate de pactar con los habitantes del pa s en el que vas a entrar, no sea que se conviertan en un lazo para ti.
guárdate de dejarte seducir por su ejemplos después de haberlos exterminado delante de ti, y de interesarte por sus dioses, preguntando: '¿Cómo rend an culto a sus dioses? Voy a hacer yo también lo mismo'.
para que no os ense en a practicar ninguna de las abominaciones a que esta gente se entrega en el culto a sus dioses, y pequéis contra Yahveh, vuestro Dios.
Cuando Yahveh, tu Dios, te haya introducido en la tierra en la que vas a entrar para tomar posesión de ella y haya arrojado delante de ti a muchas naciones: a los hititas, los guirgaseos, los amorreos, los cananeos, los perizeos, los jiveos y los jebuseos, siete naciones más numerosas y poderosas que tú,
Exterminarás, pues, a todos los pueblos que Yahveh, tu Dios, te va a entregar; no se apiaden tus ojos de ellos. Y no rendirás culto a sus dioses, porque eso ser a un lazo para ti.
y recuperen el buen sentido, libres de las redes del diablo, que los hab a capturado vivos para hacer su voluntad.
As fue dominando Josué todo el pa s: la monta a, el Negueb, la llanura, las vertientes, con todos sus reyes, sin dejar supervivientes. Y entregó al anatema a todos los seres vivientes, según hab a dispuesto Yahveh, Dios de Israel.
tened por seguro que Yahveh, vuestro Dios, no seguirá arrojando a esos pueblos de delante de vosotros, sino que os servirán de red y lazo, de látigo sobre vuestras espaldas y de espinas en vuestros ojos, hasta que desaparezcáis de esta buena tierra, que Yahveh, vuestro Dios, os ha dado.
mientras que, por vuestra parte, no haréis alianza con los habitantes de este pa s, sino que destruiréis sus altares. Pero vosotros no habéis escuchado mi voz. ¿Por qué habéis hecho esto?
Por eso también digo yo: no los arrojaré de delante de vosotros, sino que estarán a vuestro lado, y sus dioses os servirán de trampa'.
porque Saúl pensaba: 'Voy a dársela, para que le sirva de lazo, y la mano de los filisteos caiga sobre él'. Saúl dijo, pues, a David por segunda vez: 'Hoy vas a ser mi yerno'.