Todos los moabitas, al o r que los reyes hab an subido para combatirlos, convocaron a todos, desde los que ya eran capaces de ce ir armas en adelante, y se apostaron en la frontera.
Efesios 6:14 - Biblia Castilian 2003 Poneos en pie, ce ida la cintura con la verdad y colocada la coraza de la justicia; Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, Biblia Nueva Traducción Viviente Defiendan su posición, poniéndose el cinturón de la verdad y la coraza de la justicia de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Tomen la verdad como cinturón y la justicia como coraza;' La Biblia Textual 3a Edicion Estad, pues, firmes, ceñida vuestra cintura con la verdad,° revestidos con la coraza de justicia,° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Poneos en pie, ceñida la cintura con la verdad y colocada la coraza de la justicia; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos de verdad, y vestidos de la coraza de justicia; |
Todos los moabitas, al o r que los reyes hab an subido para combatirlos, convocaron a todos, desde los que ya eran capaces de ce ir armas en adelante, y se apostaron en la frontera.
Me vest de justicia como con un vestido, ten a la equidad por manto y turbante.
Será la justicia ce idor de su cintura y la fidelidad ce idor de sus caderas.
Vistió como coraza la justicia, y el casco de salvación en su cabeza; por traje se vistió las ropas de venganza, se cubrió con el celo como con un manto.
La noche está muy avanzada, el d a se acerca. Despojémonos, pues, de las obras de las tinieblas y revistámonos de las armas de la luz.
con palabra de verdad, con poder de Dios; mediante las armas de la justicia, las de la derecha y las de la izquierda;
- pues el fruto de la luz consiste en toda clase de bondad y de justicia y de verdad -,
Empu ad, pues, las armas de Dios, para que podáis resistir en el d a adverso y os mantengáis firmes tras vencerlo todo.
Pero nosotros, que somos del d a, seamos sobrios, revistidos con la coraza de la fe y con el casco de la esperanza de salvación.
Por tanto, con ánimo dispuesto y vigilante, poned toda vuestra esperanza en la gracia que os llegará cuando Jesucristo se manifieste.
Vi en la visión a los caballos y a sus jinetes, que ten an corazas de color de fuego, de jacinto y de azufre. Las cabezas de los caballos eran como cabezas de león y de sus fauces brotaba fuego, humo y azufre.
Llevaban corazas como corazas de hierro y el ruido de sus alas era como ruido de carros de muchos caballos que se lanzan al combate.