Y luego dijo al hombre: Temer al Se or es sabidur a; huir del mal, inteligencia'.
Efesios 5:17 - Biblia Castilian 2003 No seáis insensatos, sino comprended cuál es la voluntad del Se or. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente No actúen sin pensar, más bien procuren entender lo que el Señor quiere que hagan. Biblia Católica (Latinoamericana) Por tanto, no se dejen estar, sino traten de comprender cuál es la voluntad del Señor. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, no seáis insensatos, sino entended cuál sea la voluntad del Señor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No seáis insensatos, sino comprended cuál es la voluntad del Señor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. |
Y luego dijo al hombre: Temer al Se or es sabidur a; huir del mal, inteligencia'.
El temor del Se or es el principio Res de la sabidur a; bien avisados son los que lo siguen: Sin su alabanza subsiste eternamente. Tau
Sabidur a del prudente es conocer su camino; la locura de los necios es un enga o.
S, mi pueblo es insensato, a m no me conocen. Son hijos necios, no son inteligentes, expertos para el mal, hacer el bien no saben.
El que quiera cumplir la voluntad de él conocerá si mi doctrina es de Dios o si yo hablo por mi cuenta.
No os amoldéis a las normas del mundo presente, sino procurad transformaros por la renovación de la mente, a fin de que logréis discernir cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, lo agradable, lo perfecto.
Mirad, pues, con cuidado cómo os portáis; que no sea como necios, sino como sabios,
Los guardaréis y los pondréis en práctica, pues de esta manera se pondrá a prueba vuestra sabidur a y vuestra inteligencia a los ojos de los pueblos, que, cuando tengan noticia de todos estos preceptos, dirán: 'En verdad, esta gran nación es un pueblo sabio e inteligente'.
Por tanto, también nosotros, desde el d a en que lo o mos, no cesamos de rogar por vosotros y de pedir que lleguéis a la plenitud en el conocimiento de su voluntad con toda sabidur a e inteligencia espiritual,
Por lo que respecta a los de fuera, tratadlos con prudente discreción, aprovechando las ocasiones.
Dad gracias en toda ocasión; pues esto es lo que Dios desea de vosotros en Cristo Jesús.
para vivir el resto de sus d as no según las pasiones humanas, sino según la voluntad de Dios.