Efesios 4:2 - Biblia Castilian 2003 con toda humildad y mansedumbre, con comprensión, soportándoos unos a otros con amor, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, Biblia Nueva Traducción Viviente Sean siempre humildes y amables. Sean pacientes unos con otros y tolérense las faltas por amor. Biblia Católica (Latinoamericana) Sean humildes y amables, sean comprensivos y sopórtense unos a otros con amor. La Biblia Textual 3a Edicion Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos° con longanimidad unos a otros en amor,° Biblia Serafín de Ausejo 1975 con toda humildad y mansedumbre, con comprensión, soportándoos unos a otros con amor, Biblia Reina Valera Gómez (2023) con toda humildad y mansedumbre, con paciencia soportándoos los unos a los otros en amor, |
Ce irte de espada sobre el muslo de guerrero es tu brillo y tu esplendor.
Más vale ser humilde con los pobres que repartir bot n con los soberbios.
Más vale el fin de una cosa que su comienzo; más vale la paciencia que el orgullo.
Que as dice el Excelso, el Sublime, que reside en la eternidad y cuyo nombre es santo: 'En lo alto y en lo santo resido, y con el quebrantado y humilde de esp ritu, para vivificar el esp ritu de los humildes, para vivificar el corazón de los quebrantados.
Buscad a Yahveh, pobres todos del pa s, que cumpl s sus mandamientos. Buscad la justicia, buscad la humildad; quizá podáis hallar cobijo el d a de la ira de Yahveh.
Salta de gozo, hija de Sión, da gritos de júbilo, hija de Jerusalén. Mira a tu rey que viene a ti: es justo y victorioso, humilde, montado en un asno, en un pollino, hijo de un asna.
Moisés era un hombre muy humilde, más que cualquier otro hombre de sobre la faz de la tierra.
Cargad con mi yugo y aprended de m, porque soy manso y humilde de corazón, y hallaréis reposo para vosotros;
Entonces él responde: '¡Oh generación incrédula! ¿Hasta cuándo estaré entre vosotros? ¿Hasta cuándo tendré que soportaros? Traédmelo'.
sirviendo al Se or con toda humildad y lágrimas y adversidades, ocasionadas por las insidias de los jud os;
Es un deber para nosotros, los que somos fuertes, sobrellevar la flaqueza de los que no lo son, y no buscar lo que nos agrada.
Ayudaos los unos a llevar las cargas de los otros, y as cumpliréis la ley de Cristo.
por cuanto nos ha elegido en él antes de la creación del mundo, para ser santos e inmaculados en su presencia. En su amor
para que, fortalecidos bajo todos los aspectos, según el poder de su gloria, con ánimo constante y llenos de alegr a,
Pero tú, que eres hombre de Dios, huye de estas cosas; corre en busca de la honradez, la piedad, la fe, el amor, la constancia, la mansedumbre.
suave al instruir a los contrarios, por si acaso Dios les concede que se conviertan, reconozcan la verdad
Por lo cual, despojándoos de toda impureza y de todo resto de maldad, recibid con mansedumbre la palabra plantada en vosotros, que es la que puede salvaros.
Antes bien, en vuestro corazón, tened por santo al Se or, a Cristo, siempre dispuestos a responder a cualquiera que os pida razón de vuestra esperanza;
En fin, sed todos de un mismo sentir, compartid alegr as y tristezas, cultivad el amor fraterno, sed misericordiosos, humildes;