Sabed bien que él es Dios: él nos ha hecho y somos suyos, su nación y reba o de sus pastos.
Efesios 2:10 - Biblia Castilian 2003 Porque de él somos hechura, creados en Cristo Jesús para las obras buenas que Dios nos preparó de antemano como norma de conducta. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás. Biblia Católica (Latinoamericana) Lo que somos es obra de Dios: hemos sido creados en Cristo Jesús con miras a las buenas obras que Dios dispuso de antemano para que nos ocupáramos en ellas. La Biblia Textual 3a Edicion porque somos hechura suya, creados en Jesús el Mesías para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en ellas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque de él somos hechura, creados en Cristo Jesús para las obras buenas que Dios nos preparó de antemano como norma de conducta. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas. |
Sabed bien que él es Dios: él nos ha hecho y somos suyos, su nación y reba o de sus pastos.
el Se or lleva hasta el término mi causa. Tus favores, Se or, son para siempre: no abandones las obras de tus manos.
Concédeme sentir el gozo y la alegr a, y puedan solazarse estos huesos que tú has quebrantado.
Entonces los arrojé en su propia obstinación, que caminaran según sus caprichos.
porque, cuando vean sus hijos, la obra de mis manos en medio de él, santificarán mi nombre'. Santificarán al Santo de Jacob y ante el Dios de Israel temblarán. Conocerán los errados de esp ritu la cordura, y los murmuradores aprenderán la sensatez.
a todo el que me llame por mi nombre a los que creé para mi gloria, a los que hice y formé'.
Recuerda estas cosas, Jacob, y tú, Israel, que eres mi siervo: yo te formé, tú eres mi siervo, Israel, jamás te olvidaré.
En tu pueblo todos serán justos, para siempre poseerán la tierra: brote de las plantaciones de Yahveh, obra de sus manos para gloria suya.
para alegrar a los enlutados de Sión; para darles corona en vez de ceniza, óleo de alegr a en vez de luto, canto de alabanza en vez de apocamiento. Se les llamará terebintos de justicia, plantación de Yahveh para gloria suya.
Ésta será la alianza que sellaré con la casa de Israel, después de aquellos d as - oráculo de Yahveh -: Pongo mi ley en su interior y la escribo en su corazón; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.
Alumbre as vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Pero el que practica la verdad se acerca a la luz, y as queda manifiesto que sus obras están hechas en Dios.'
La Iglesia, mientras tanto, gozaba de paz en toda Judea, Galilea y Samar a, se edificaba y caminaba en el temor del Se or y crec a con la consolación del Esp ritu Santo.
En Jope hab a una disc pula de nombre Tabitá, que traducido significa 'Gacela'. Estaba llena de buenas obras y de limosnas que hac a.
As pues, ahora ya no pesa ninguna condena sobre quienes están en Cristo Jesús.
Porque a los que de antemano conoció, también de antemano los destinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que éste fuera el primogénito entre muchos hermanos.
Porque somos colaboradores con Dios; y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
De modo que, si alguno está en Cristo es una nueva criatura. Lo viejo pasó. Ha empezado lo nuevo.
Y el que nos ha dispuesto para esto es Dios, que nos dio la fianza del Esp ritu.
Y Dios tiene poder para colmaros con toda clase de gracias, de suerte que, además de tener siempre lo suficiente en todo, os sobre para contribuir a toda obra buena,
Pues lo que cuenta no es la circuncisión ni la no circuncisión, sino la nueva criatura.
Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios, al pueblo santo, a los fieles en Cristo Jesús [que están en Éfeso]:
por cuanto nos ha elegido en él antes de la creación del mundo, para ser santos e inmaculados en su presencia. En su amor
Pero ahora, en Cristo Jesús, vosotros, los que una vez estabais lejos, habéis sido puestos cerca por la sangre de Cristo.
abolió la ley de los mandamientos formulados en ordenanzas, para crear en él, de los dos, un solo hombre nuevo, estableciendo la paz,
en que vivisteis en el pasado siguiendo la corriente de este mundo, siguiendo al pr ncipe de la potestad del aire, al esp ritu que actúa ahora entre los hijos de la rebeld a,
As, pues, yo, prisionero por el Se or, os exhorto a conduciros de una manera digna de la vocación a la que fuisteis llamados,
y os revistáis del hombre nuevo, que ha sido creado a imagen de Dios en justicia y santidad de la verdad.
¿As pagas a Yahveh, pueblo necio e insensato? ¿No es él tu padre, el que te creó, el que te hizo y te dio consistencia?
Seguid en todo el camino que Yahveh, vuestro Dios, os ha se alado, para que viváis y seáis felices y prolonguéis vuestros d as en la tierra que vais a ocupar.
con la firme esperanza de que el que empezó entre vosotros la obra buena, la irá llevando a su término hasta el d a de Cristo Jesús.
Pues es Dios quien, según su beneplácito, activa en vosotros tanto el querer como el obrar.
para que caminéis según el Se or se merece, a plena satisfacción suya, dando frutos en toda obra buena y creciendo en el conocimiento de Dios;
y de haberos revestido de la nueva, que se va renovando con miras al conocimiento profundo, según la imagen del que la creó:
sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que hacen profesión de religiosidad.
que dé pruebas de su buena conducta, o sea, haber educado a los hijos, haber dado hospitalidad, haber lavado los pies a los fieles, haber asistido a los atribulados, haberse ejercitado en toda suerte de buenas obras.
Lo mismo pasa con las obras: las buenas están al descubierto; las que no lo son no pueden quedar ocultas.
que practiquen el bien, que se hagan ricos en buenas obras, que sean generosos, dadivosos,
As, pues, quien se purifique por completo de estas cosas pertenecerá a la vajilla de uso noble, consagrada, útil para el due o, apta para toda obra buena.
De esta manera, el hombre de Dios estará bien formado y bien pertrechado para toda obra buena.
el cual se entregó por nosotros, para rescatarnos de toda iniquidad y para purificarnos, haciendo de nosotros un pueblo que fuera su patrimonio, dedicado a buenas obras.
en todo. Da ejemplo tú mismo con obras buenas,con integridad en la ense anza, dignidad,
Recuérdales que vivan sumisos a los poderes y autoridades, que cumplan sus órdenes y estén dispuestos para toda obra buena,
Que los nuestros aprendan a sobresalir en las buenas obras, para hacer frente a las necesidades de la vida. As no quedarán sin fruto.
He aqu una afirmación digna de crédito, y quiero que tú la mantengas con tesón: que los que han cre do en Dios se comprometan a sobresalir en obras buenas. Esto es bueno y provechoso a los hombres.
y miremos los unos por los otros, incitándonos al amor y a las buenas obras.
os capacite con toda clase de bienes para cumplir su voluntad, realizando en nosotros lo que él quiere por medio de Jesucristo, a quien sea rendida gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Llevad entre los gentiles una conducta ejemplar. As, en aquellas mismas cosas en que os calumnian como malhechores, cuando vean vuestras buenas obras glorificarán a Dios en el d a de la visita.
Pero si caminamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros; y la sangre de Jesús, su Hijo, nos purifica de todo pecado.