Todos hemos de morir; y como el agua que se derrama en tierra no vuelve a recogerse, as Dios tampoco levanta un cadáver. Piense, pues, sus planes el rey, para no mantener desterrado lejos de él al proscrito.
Eclesiastés 9:5 - Biblia Castilian 2003 Los vivos saben al menos que han de morir, pero los muertos no saben nada; no perciben ya salario alguno, porque su memoria yace en el olvido. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. Biblia Nueva Traducción Viviente Los que están vivos al menos saben que un día van a morir, pero los muertos no saben nada. Ya no reciben más recompensas, y nadie los recuerda. Biblia Católica (Latinoamericana) Los vivos saben que morirán; los muertos, nada saben. No tienen nada que esperar: son sólo un recuerdo olvidado. La Biblia Textual 3a Edicion Porque los vivos saben que han de morir, pero los muertos nada saben, ni tienen más recompensa, porque hasta su memoria es puesta en el olvido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los vivos saben al menos que han de morir, pero los muertos no saben nada; no perciben ya salario alguno, porque su memoria yace en el olvido. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. |
Todos hemos de morir; y como el agua que se derrama en tierra no vuelve a recogerse, as Dios tampoco levanta un cadáver. Piense, pues, sus planes el rey, para no mantener desterrado lejos de él al proscrito.
Son alabados sus hijos, y él lo ignora; son despreciados, y él nada sabe.
Ya sé que me llevas a la muerte, al lugar de cita de todos los vivientes.
que estén siempre presentes al Se or y borre él de la tierra su recuerdo.
¿Se proclaman tus prodigios en las sombras y tu justicia en la tierra del olvido?
No queda recuerdo de los antiguos, ni quedará tampoco de los venideros entre los que vengan después.
Porque del sabio, lo mismo que del necio, no habrá recuerdo duradero: con el paso del tiempo, todo es olvidado. S; el sabio muere lo mismo que el necio.
Más vale ir a casa de duelo que ir a casa de banquete; porque aquél es el fin de todo hombre, y el que vive lo tendrá presente.
Y as, he visto malvados conducidos a la tumba desde el lugar santo, celebrados y glorificados en la ciudad por cuanto hab an hecho. También eso es vanidad:
Todo lo que tu mano pueda hacer, hazlo con decisión, porque en el seol, adonde vas, no hay actividad, ni razón, ni ciencia, ni sabidur a.
Mientras uno permanece unido a los que viven, hay esperanza, porque más vale perro vivo que león muerto.
Los muertos no reviven, las sombras no se levantan; tú los castigaste y los aniquilaste, borraste todo su recuerdo.
Porque tú eres nuestro padre; Abrahán no sabe de nosotros, ni Israel nos reconoce. Tú, Yahveh, eres nuestro padre; tu nombre desde siempre 'Nuestro redentor'.
Y as como es destino de los hombres morir una sola vez y, tras de esto, el juicio,