Cantares 5:14 - Biblia Castilian 2003 Sus brazos, torneados en oro, incrustados de piedras de Tarsis. Su vientre, marfil pulimentado, cubierto de zafiros. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Sus manos, como anillos de oro engastados de jacintos; Su cuerpo, como claro marfil cubierto de zafiros. Biblia Nueva Traducción Viviente Sus brazos son como barras de oro torneadas, adornados con berilo. Su cuerpo es como marfil reluciente; resplandece de lapislázuli. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus manos son aros de oro
adornados con piedras de Tarsis.
Su vientre, marfil pulido,
cubierto de zafiros. La Biblia Textual 3a Edicion Sus brazos como barras de oro Engastados con piedras de Tarsis; Su torso, tallado de marfil, Recubierto de zafiros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sus brazos, torneados en oro, incrustados de piedras de Tarsis. Su vientre, marfil pulimentado, cubierto de zafiros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Sus manos, como anillos de oro engastados de berilo; su vientre, como claro marfil cubierto de zafiros. |
y tu vigor de rey que quiere la justicia: tú estableces el juicio en equidad y ejecutas la justicia con Jacob.
Tu diestra, Yahveh, es fuerte y poderosa, tu diestra, Yahveh, aplasta al enemigo;
y vieron al Dios de Israel. Bajo sus pies hab a como un pavimento de zafiro, tan puro como el mismo cielo.
y un crisólito, un ónice y un jaspe en la cuarta. Todas estas piedras irán engastadas en oro.
un crisólito, un ónice y un jaspe en la cuarta. Las piedras iban engastadas en oro.
¡Qué lindos son tus pies con sandalias de princesa! Las curvas de tus caderas son collares, hechura de la mano de un artista.
¡Pobrecilla, zarandeada, desconsolada! Aqu estoy asentando tus piedras con argamasa, te fundaré sobre zafiros;
El aspecto de las ruedas y su estructura era como el centelleo del topacio. Las cuatro ten an la misma forma; su aspecto y su estructura era como si una rueda estuviera encajada dentro de la otra.
Su cuerpo era como crisólito, su rostro parecia un relámpago, sus ojos como antorchas encendidas, sus brazos y sus piernas como el brillo del bronce bru ido, y el sonido de sus palabras como el clamor de una multitud.