Después dijo David a toda la asamblea: '¡Bendecid a Yahveh, vuestro Dios!'. Y toda la asamblea bendijo a Yahveh, Dios de sus padres. Todos se inclinaron y postraron ante Yahveh y ante el rey.
Apocalipsis 4:10 - Biblia Castilian 2003 caerán los veinticuatro ancianos ante el que está sentado en el trono, adorarán al que vive por los siglos de los siglos y arrojarán sus coronas ante el trono, diciendo: Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: Biblia Nueva Traducción Viviente los veinticuatro ancianos se postran y adoran al que está sentado en el trono (el que vive por siempre y para siempre), y ponen sus coronas delante del trono, diciendo: Biblia Católica (Latinoamericana) los veinticuatro ancianos se arrodillan ante el que está sentado en el trono, adoran al que vive por los siglos de los siglos y arrojan sus coronas delante del trono diciendo: La Biblia Textual 3a Edicion los veinticuatro ancianos se postrarán delante del que está sentado en el trono, y adorarán al que vive por los siglos de los siglos, y colocarán° sus coronas delante del trono, diciendo: Biblia Serafín de Ausejo 1975 caerán los veinticuatro ancianos ante el que está sentado en el trono, adorarán al que vive por los siglos de los siglos y arrojarán sus coronas ante el trono, diciendo: Biblia Reina Valera Gómez (2023) los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive para siempre jamás, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: |
Después dijo David a toda la asamblea: '¡Bendecid a Yahveh, vuestro Dios!'. Y toda la asamblea bendijo a Yahveh, Dios de sus padres. Todos se inclinaron y postraron ante Yahveh y ante el rey.
Y todos los israelitas, al ver bajar el fuego y la gloria de Yahveh sobre el templo, se postraron rostro en tierra sobre el pavimento y adoraron y alabaron a Yahveh: 'Porque es bueno, porque es eterna su misericordia'.
Entonces Job se levantó, rasgó sus vestiduras y se rasuró la cabeza. Luego, se echó en tierra, se postró
No a nosotros, Se or, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria, por tus mercedes y tu lealtad.
Venid y saludémoslo, postrados, doblemos la rodilla ante el Se or, nuestro hacedor.
El a o de la muerte del rey Oz as, vi al Se or sentado en un trono alto y elevado. Las orlas de su vestido llenaban el templo.
Y o al hombre vestido de lino que estaba sobre las aguas del r o. Levantó hacia el cielo la mano derecha y la mano izquierda, y juró por el que vive eternamente: 'Dentro de un tiempo, dos tiempos y la mitad de un tiempo. Cuando termine la opresión del pueblo santo, se cumplirán todas estas cosas'.
'Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, ensalzo y glorifico al rey del cielo, cuyas obras son todas verdad, sus caminos justicia y puede humillar a los que caminan con soberbia.'
Entrando en la casa, vieron al ni o con Mar a, su madre y, postrados en tierra, lo adoraron. Abrieron luego sus cofres y le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra.
Ellos [después de adorarlo] se volvieron a Jerusalén, llenos de inmenso gozo.
Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia no ha sido estéril en m; al contrario, he trabajado más que todos ellos, no precisamente yo, sino la gracia de Dios que está conmigo.
S; yo alzo mis manos al cielo y digo: tan cierto como que vivo eternamente,
Y juró por el que vive por los siglos de los siglos, el que creó el cielo y lo que en él hay, y la tierra y lo que en ella hay, y el mar y lo que en él hay, que no habrá más tiempo;
Y los veinticuatro ancianos, los que estaban sentados en sus tronos ante Dios se postraron en tierra y adoraron a Dios,
¿Quién no temerá, Se or, y no glorificará tu nombre? Porque sólo tú eres santo, porque todos los pueblos vendrán y se postrarán ante ti, porque tus justos designios han quedado manifiestos'.
Uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira del Dios que vive por los siglos de los siglos.
Los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y dec an: '¡Amén! ¡Aleluya!'.
Al punto fui arrebatado en esp ritu. Y vi un trono colocado en el cielo y sobre el trono, a uno sentado.
Alrededor del trono vi veinticuatro tronos y sentados en los tronos veinticuatro ancianos con vestiduras blancas y coronas de oro sobre sus cabezas.
Y cada vez que los seres vivientes den gloria, honor y acción de gracias al que está sentado en el trono, al que vive por los siglos de los siglos,
Los cuatro seres vivientes dec an: 'Amén'. Y los ancianos se postraron y adoraron.
Cuando lo tomó, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos cayeron ante el Cordero. Cada uno de ello ten a una citara y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones del pueblo santo.
Todos los ángeles estaban de pie alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron ante el trono y adoraron a Dios,