y suplica a Dios, que le es propicio; ve con alegr a su rostro y anuncia a los hombres su justificación;
Apocalipsis 22:4 - Biblia Castilian 2003 verán su rostro y llevarán su nombre en la frente. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. Biblia Nueva Traducción Viviente Verán su rostro y tendrán su nombre escrito en la frente. Biblia Católica (Latinoamericana) Verán su rostro y llevarán su nombre en la frente. Ya no habrá noche. La Biblia Textual 3a Edicion y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. Biblia Serafín de Ausejo 1975 verán su rostro y llevarán su nombre en la frente. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. |
y suplica a Dios, que le es propicio; ve con alegr a su rostro y anuncia a los hombres su justificación;
Por mi parte, en rectitud, podré ver tu presencia y, al despertar, saciarme con tu vista.
Como anhela la cierva al lado del torrente, as te anhela a ti, oh Dios, el alma m a.
A un rey en su esplendor contemplarán tus ojos, y verán un vast simo pa s.
Como el narciso ha de florecer; exultará, s, exultará jubiloso. Le ha sido concedida la gloria del L bano, el esplendor del Carmelo y del Sarón. Ellos verán la gloria de Yahveh, el esplendor de nuestro Dios.
Se revelará la gloria de Yahveh y verá todo mortal a la vez que la boca de Yahveh ha hablado.
El que quiera servirme que me siga; y donde yo esté, all estará también mi servidor. El que quiera servirme, será honrado por mi Padre'.
'Padre quiero que donde voy a estar, estén también conmigo los que me has dado y as contemplen mi gloria, la que me has dado, porque me has amado desde antes de la creación del mundo.
Porque, ahora vemos mediante un espejo, borrosamente; entonces, cara a cara. Ahora conozco de modo parcial, entonces conoceré plenamente, con la perfección con que soy conocido.
Buscad la paz con todos, as como la santificación, sin la cual nadie podrá ver al Se or.
Miré y apareció el Cordero, de pie sobre el monte Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que ten an su nombre y el nombre de su Padre escrito en la frente.
Al que venza, lo haré columna en el santuario de mi Dios, y no saldrá ya fuera jamás; grabaré en él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad de mi Dios, de la nueva Jerusalén, la que baja del cielo, de junto a mi Dios, y mi nombre nuevo'.
diciendo: 'No da éis ni a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que no hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios'.