Revelación de Jesucristo, la que Dios le dio para que mostrara a sus siervos lo que ha de suceder en breve. Se la manifestó a su siervo Juan por medio del ángel que le envió.
Apocalipsis 21:9 - Biblia Castilian 2003 Vino uno de los siete ángeles que ten an las siete copas llenas de las siete plagas finales y me dijo: 'Ven; te mostraré a la desposada, la esposa del Cordero'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas con las últimas siete plagas se me acercó y me dijo: «¡Ven conmigo! Te mostraré a la novia, la esposa del Cordero». Biblia Católica (Latinoamericana) Se acercó a mí uno de los siete ángeles de las siete copas llenas de las siete últimas plagas y me dijo: 'Ven, que te voy a mostrar a la novia, a la esposa del Cordero. La Biblia Textual 3a Edicion Y vino uno de los siete ángeles que tienen las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven, te mostraré la novia, la esposa del Cordero. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas finales y me dijo: 'Ven; te mostraré a la desposada, la esposa del Cordero'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero. |
Revelación de Jesucristo, la que Dios le dio para que mostrara a sus siervos lo que ha de suceder en breve. Se la manifestó a su siervo Juan por medio del ángel que le envió.
Vino uno de los siete ángeles que ten an las siete copas y me habló diciendo: 'Ven, voy mostrarte el juicio contra la gran prostituta, la que está asentada junto a aguas caudalosas.
Alegrémonos y regocijémonos y démosle gloria, porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
Midió la muralla y ten a ciento cuarenta y cuatro codos, según la medida humana, que era la del ángel.
Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del cielo de parte de Dios, preparada como esposa ataviada para su esposo.
Me mostró luego un r o de agua de vida, resplandeciente como cristal, que sale del trono de Dios y del Cordero.
El Esp ritu y la esposa dicen: 'Ven'. El que oiga, diga: 'Ven'. Quien tenga sed, que se acerque. El que quiera, tome gratis del agua de la vida.
Después me dijo: 'Éstas son las palabras fidedignas y verdaderas. El Se or, Dios de los esp ritus de los profetas, envió su ángel para mostrar a sus siervos lo que ha de suceder en seguida.