Una voz: el Se or sobre las aguas, el Dios de la gloria hace tronar, Yahveh sobre las aguas numerosas.
Apocalipsis 10:3 - Biblia Castilian 2003 y gritó con gran voz, como ruge el león. Cuando gritó, los siete truenos dieron su propio estampido. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y clamó a gran voz, como ruge un león; y cuando hubo clamado, siete truenos emitieron sus voces. Biblia Nueva Traducción Viviente y dio un fuerte grito, como el rugido de un león. Y cuando gritó, los siete truenos respondieron. Biblia Católica (Latinoamericana) y gritó su anuncio con voz tremenda, parecida al rugido del león; al momento los siete truenos entregaron su propio mensaje. La Biblia Textual 3a Edicion clamó a gran voz, como ruge° un león; y cuando clamó, los siete truenos emitieron sus propias voces. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y gritó con gran voz, como ruge el león. Cuando gritó, los siete truenos dieron su propio estampido. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y clamó con gran voz, como cuando un león ruge; y cuando hubo clamado, siete truenos emitieron sus voces. |
Una voz: el Se or sobre las aguas, el Dios de la gloria hace tronar, Yahveh sobre las aguas numerosas.
As me ha dicho Yahveh: 'Como ruge el león o el cachorro por su presa, cuando contra él se da cita una turba de pastores, y a sus voces no se asusta ni cede ante su multitud, as bajará Yahveh Sebaot a guerrear sobre el monte Sión y sobre su collado'.
Yahveh como héroe avanza, como un guerrero excita su ardor; vocea, s, vocifera, contra sus enemigos es un campeón.
Tiene un rugido como de leona, ruge como los cachorros; con un gru ido agarra la presa, la retiene, no hay quien se la arranque.
Profet zales, pues, todas estas cosas y diles: 'Ruge Yahveh desde lo alto, da voces desde su santa morada; ruge fuerte sobre su pradera, responde con gritos como los pisadores de uva. A todos los habitantes de la tierra
El rumor de las alas de los querubines llegaba hasta el atrio exterior; era como la voz de Sadday cuando habla.
En pos de Yahveh marcharán; él rugirá como un león; a su rugido, acudirán temerosos los hijos desde el occidente.
Dijo: 'Yahveh ruge desde Sión, da voces desde Jerusalén: se agostan los pastizales de los pastores, se deseca la cumbre del Carmelo'.
O una voz del cielo como estruendo de muchas aguas y como estampido de gran trueno. La voz que o a era como de citaristas que tocan sus c taras.
Y vi otra se al grande y maravillosa en el cielo: siete ángeles que ten an siete plagas, las últimas, porque con ellas se consumará la ira de Dios.
Uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira del Dios que vive por los siglos de los siglos.
Del trono salen relámpagos y voces y truenos. Ante el trono están ardiendo siete antorchas de fuego, que son los siete esp ritus de Dios.
Tomó el ángel el incensario, lo llenó de ascuas del altar y lo arrojó sobre la tierra. Y hubo truenos y voces y relámpagos y terremoto.