Ahora ven, escr belo ante ellos en una tablilla, grábalo en bronce, para que sirva hasta el d a postrero de testimonio perpetuo.
Apocalipsis 1:11 - Biblia Castilian 2003 que dec a: 'Escribe en un rollo lo que vas a ver y env alo a las siete iglesias: a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea. Biblia Nueva Traducción Viviente que decía: «Escribe en un libro todo lo que veas y envíalo a las siete iglesias que están en las ciudades de Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea». Biblia Católica (Latinoamericana) Escribe en un libro lo que veas y envíalo a las siete Iglesias: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardes, Filadelfia y Laodicea. La Biblia Textual 3a Edicion que decía:° Escribe lo que ves en un rollo, y envíalo a las siete iglesias:° a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardis, a Filadelfia y a Laodicea. Biblia Serafín de Ausejo 1975 que decía: 'Escribe en un rollo lo que vas a ver y envíalo a las siete iglesias: a Éfeso, a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia; a Éfeso, y a Esmirna, y a Pérgamo, y a Tiatira, y a Sardis, y a Filadelfia, y a Laodicea. |
Ahora ven, escr belo ante ellos en una tablilla, grábalo en bronce, para que sirva hasta el d a postrero de testimonio perpetuo.
as dice Yahveh, Dios de Israel: 'Escribe en un libro todas las palabras que te he dicho.
Yahveh me dio esta respuesta: 'Escribe la visión y grábala en tablillas, para que pueda leerse de corrido.
Una de ellas, por nombre Lidia, traficante en púrpuras, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, nos escuchaba atentamente y el Se or le abrió el corazón para aceptar lo que Pablo dec a.
Llegó a Éfeso un jud o, por nombre Apolo, alejandrino de origen, hombre elocuente y versado en las Escrituras.
Si sólo por motivos humanos luché en Éfeso con fieras, ¿de qué me servir a? Si los muertos no son resucitados, ¡A comer y beber, que ma ana moriremos!
Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios, al pueblo santo, a los fieles en Cristo Jesús [que están en Éfeso]:
'Ahora, pues, escribid este cántico; ensé aselo a los israelitas, ponlo en su boca, para que este cántico me sirva de testimonio contra los israelitas,
Pues quiero que sepáis qué clase de batalla estoy librando por vosotros, por los de Laodicea y por cuantos no me han conocido personalmente,
Cuando estaba a punto de partir para Macedonia, te rogué que te quedaras en Éfeso, para que urgieras a ciertos individuos a no ense ar doctrinas extra as,
Cuando lo vi, ca como muerto a sus pies. Él puso su diestra sobre m y me dijo: 'No temas. Yo soy el primero y el último
Escribe, pues, las cosas que has visto: las que son y las que han de suceder después.
Juan se hace testigo de la palabra de Dios y del testimonio de Jesucristo, de todo cuanto vio.
En cuanto al misterio de las siete estrellas que has visto a mi diestra y de los siete candelabros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete Iglesias; y los siete candelabros son las siete Iglesias'.
Juan, a las siete iglesias de Asia: gracia y paz a vosotros de parte de aquel que es, que era y que ha de venir, de parte de los siete esp ritus que están ante su trono
Yo soy el alfa y la omega, dice el Se or Dios, el que es, el que era y el que ha de venir, el todopoderoso.
Estaba yo a punto de escribir al dar los siete truenos cuando o una voz del cielo que dec a: 'Sella las cosas que hablaron los siete truenos y no las escribas'.
Y o una voz del cielo que dec a: 'Escribe: 'Dichosos ya desde ahora los que mueren en el Se or'. S, dice el Esp ritu, que descansen de sus fatigas, pues sus obras los acompa an'.
Entonces me dice: 'Escribe: dichosos los invitados al banquete de las bodas del Cordero'. Y a adió: 'Éstas son las palabras verdaderas de Dios'.
Al ángel de la Iglesia de Éfeso escribe: 'Esto dice el que tiene en su diestra las siete estrellas, el que se pasea en medio de los siete candelabros de oro:
Al ángel de la Iglesia de Pérgamo escribe: 'Esto dice el que tiene la aguda espada de dos filos:
Al ángel de la Iglesia de Tiatira escribe: 'Esto dice el Hijo de Dios, el que tiene los ojos como llama de fuego y los pies semejantes al bronce brillante:
Y a vosotros, los que quedáis en Tiatira, cuantos no segu s esa doctrina, los que no habéis conocido las profundidades de Satanás, como ellos las llaman, os digo: no echo sobre vosotros otra carga;
Al ángel de la Iglesia de Esmirna escribe: 'Esto dice el primero y el último, el que estuvo muerto y volvió a la vida:
El que estaba sentado en el trono dijo: 'Mirad, todo lo hago nuevo'. Y a adió: 'Escribe; porque éstas son las palabras fidedignas y verdaderas'.
Y a adió: 'No selles las palabras de la profec a de este libro, porque el tiempo está cerca.
Yo, Jesús, he enviado mi ángel para que testifique estas cosas acerca de las Iglesias. Yo soy el reto o y el linaje de David, el lucero brillante de la ma ana.
Al ángel de la Iglesia de Sardes escribe: 'Esto dice el que tiene los siete esp ritus de Dios y las siete estrellas: 'Conozco tus obras. Se dice que vives, pero estás muerto.
Al ángel de la Iglesia de Laodicea escribe: 'Esto dice el Amén, el testigo fiel y veraz, el principio de la creación de Dios:
Pero tienes en Sardes unas pocas personas que no han manchado sus vestiduras. Éstos andarán conmigo vestidos de blanco, porque son dignos.
Al ángel de la Iglesia de Filadelfia escribe: 'Esto dice el santo, el verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre sin que nadie pueda cerrar, el que cierra sin que nadie pueda abrir: