Puede ser que Yahveh considere mi aflicción y me devuelva su bondad a cambio de las maldiciones de hoy'.
Abdías 1:13 - Biblia Castilian 2003 No entres por la puerta de mi pueblo en el d a de su infortunio; no te deleites también tú viendo sus males en el d a de su angustia; no alargues la mano a sus riquezas en el d a de su desgracia. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 No debiste haber entrado por la puerta de mi pueblo en el día de su quebrantamiento; no, no debiste haber mirado su mal en el día de su quebranto, ni haber echado mano a sus bienes en el día de su calamidad. Biblia Nueva Traducción Viviente No debiste saquear la tierra de Israel mientras ellos sufrían semejante calamidad. No debiste regodearte de su destrucción mientras sufrían semejante calamidad. No debiste robar sus riquezas mientras sufrían semejante calamidad. Biblia Católica (Latinoamericana) No vengas a mirar a la puerta el día en que le va mal a mi pueblo: ¿será bueno que veas sus sufrimientos el día de su desgracia? No eches mano de sus riquezas en el día de la desventura. La Biblia Textual 3a Edicion Ni entres en la puerta° de mi pueblo En el día de su infortunio, Ni disfrutes de su desgracia en el día de su infortunio, Ni eches mano° a sus bienes en el día de su infortunio,° Biblia Serafín de Ausejo 1975 No entres por la puerta de mi pueblo en el día de su infortunio; no te deleites también tú viendo sus males en el día de su angustia; no alargues la mano a sus riquezas en el día de su desgracia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No debiste haber entrado por la puerta de mi pueblo en el día de su quebrantamiento; no, no debiste haber mirado su mal el día de su quebranto, ni haber echado mano a sus bienes el día de su calamidad. |
Puede ser que Yahveh considere mi aflicción y me devuelva su bondad a cambio de las maldiciones de hoy'.
No me gocé en la desgracia de mi enemigo ni celebré que el mal le alcanzara.
Mastines me circundan y me asedia una turba de malvados, ligadas mis manos y mis pies.
También sus mercenarios son como novillos cebados; pero también ellos se vuelven, huyen a una, no resisten, pues les llega el d a de su ruina, el tiempo de su castigo.
'Por haber dicho: 'Las dos naciones y los dos pa ses serán m os, pues los ocuparemos' - a pesar de que Yahveh estaba all -,
'Porque has tenido un odio secular contra los israelitas y los entregaste a la espada cuando ocurrió su desastre, en el momento de su último castigo,
As dice el Se or Yahveh: porque el enemigo ha dicho acerca de vosotras: '¡Qué bien! Los antiguos lugares altos son nuestra posesión',
por eso profetiza y di: as dice el Se or Yahveh: precisamente por eso, porque os han devastado y os han puesto asechanzas por todas partes, de modo que sois posesión de las demás naciones y habéis ca do en poder de las lenguas y habladur as del pueblo,
pero con gran ira estoy airado contra las naciones orgullosas que, cuando estuve un tanto airado, cooperaron al desastre.