Y Natán se marchó a su casa. Hirió Yahveh al ni o que la mujer de Ur as le hab a dado a David, y enfermó gravemente.
2 Samuel 12:14 - Biblia Castilian 2003 Pero por haber despreciado con esta acción a Yahveh, el hijo que te ha nacido morirá irremisiblemente'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, como has mostrado un total desprecio por la palabra del Señor con lo que hiciste, tu hijo morirá. Biblia Católica (Latinoamericana) Sin embargo, puesto que con esto despreciaste a Yavé, el hijo que te nació morirá' La Biblia Textual 3a Edicion Pero como con este asunto has blasfemado grandemente de YHVH,° el hijo que te ha nacido ciertamente morirá. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero por haber despreciado con esta acción a Yahveh, el hijo que te ha nacido morirá irremisiblemente'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá. |
Y Natán se marchó a su casa. Hirió Yahveh al ni o que la mujer de Ur as le hab a dado a David, y enfermó gravemente.
Y a ad: 'No está bien lo que hacéis. ¿No deber ais caminar en el temor de nuestro Dios, para evitar los insultos de nuestros enemigos los gentiles?
¿Hasta cuándo, Se or, ha de ultrajar el opresor? ¿Despreciarán los enemigos tu nombre para siempre?
Tú, Se or nuestro Dios, les respond as: fuiste con ellos indulgente, aunque también castigabas sus excesos.
Y ahora, ¿qué haré aqu ? - dice Yahveh -; pues mi pueblo gratis ha sido arrebatado, sus dominadores ululan - dice Yahveh -, y siempre, todo el d a, mi nombre es blasfemado.
Sólo a vosotros conoc entre todas las familias de la tierra, por eso os castigaré por todas vuestras iniquidades.
¡Ay del mundo por los escándalos! Porque es inevitable que los haya, pero ¡ay del hombre por quien viene el escándalo!
Pues, según está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles a causa de vosotros.
Cuando el Se or nos castiga, nos corrige, para que no seamos condenados con el mundo.
Porque el Se or reprende a quien él ama, y castiga a todos los hijos que adopta.
Yo, a los que amo, los reprendo y castigo. ¡An mate, pues, y conviértete!