Entonces Yahveh envió contra él bandas de caldeos, arameos, moabitas y amonitas; las envió contra Judá para destruirlo, según el oráculo que Yahveh hab a pronunciado por medio de sus siervos los profetas.
2 Reyes 6:23 - Biblia Castilian 2003 Les sirvió un gran banquete y, después de haber comido y bebido, los despidió y ellos se volvieron a su se or. Y en adelante, los guerrilleros arameos no volvieron a hacer correr as por tierras de Israel. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces se les preparó una gran comida; y cuando habían comido y bebido, los envió, y ellos se volvieron a su señor. Y nunca más vinieron bandas armadas de Siria a la tierra de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el rey hizo un gran banquete para ellos y luego los mandó de regreso a su amo. Después de este incidente, los saqueadores arameos se mantuvieron lejos de la tierra de Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey les sirvió entonces una buena comida, y comieron y bebieron. Después los despidió y regresaron donde su amo; desde ese día las bandas arameas dejaron de hacer incursiones en el territorio de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces preparó° una gran comida para ellos, y cuando hubieron comido y bebido, los dejó ir, y regresaron a sus señores; y ya no volvieron a entrar cuadrillas° de Siria en la tierra de Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Les sirvió un gran banquete y, después de haber comido y bebido, los despidió y ellos se volvieron a su señor. Y en adelante, los guerrilleros arameos no volvieron a hacer correrías por tierras de Israel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces él les preparó una gran comida; y cuando hubieron comido y bebido, los envió, y ellos se volvieron a su señor. Y nunca más vinieron cuadrillas de Siria a la tierra de Israel. |
Entonces Yahveh envió contra él bandas de caldeos, arameos, moabitas y amonitas; las envió contra Judá para destruirlo, según el oráculo que Yahveh hab a pronunciado por medio de sus siervos los profetas.
Los arameos, en una de sus expediciones guerrilleras, se hab an tra do de la tierra de Israel, como cautiva, a una jovencita que quedó al servicio de la esposa de Naamán.
Los hombres que fueron designados nominalmente tomaron a los prisioneros y vistieron a todos los que estaban desnudos con lo del bot n: los vistieron, los calzaron, les dieron de comer y de beber, los lavaron, montaron en asnos a todos los desfallecidos y los llevaron a Jericó, la ciudad de las palmeras, junto a sus hermanos. Luego se volvieron a Samar a.
La guerra hace cesar en todos los confines, rompe arcos, quiebra lanzas y consume los carros en el fuego.
Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen eso mismo también los gentiles?
Vosotros, en cambio, amad a vuestros enemigos, haced el bien y prestad sin esperar nada. Entonces será grande vuestra recompensa, y seréis hijos del Alt simo, que es bueno aun con los desagradecidos y malvados.