Se levantó Labán de madrugada, besó a sus hijos y a sus hijas y los bendijo. Luego partió y regresó a su lugar.
2 Reyes 6:16 - Biblia Castilian 2003 Respondió él: 'No tengas miedo; que son muchos más los que están con nosotros que los que están con ellos'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Él le dijo: No tengas miedo, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente —¡No tengas miedo! —le dijo Eliseo—. ¡Hay más de nuestro lado que del lado de ellos! Biblia Católica (Latinoamericana) Le respondió: 'No temas porque los que están con nosotros son más numerosos que los que están con ellos'. La Biblia Textual 3a Edicion Pero él respondió: No tengas temor, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió él: 'No tengas miedo; que son muchos más los que están con nosotros que los que están con ellos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él le dijo: No tengas miedo; porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. |
Se levantó Labán de madrugada, besó a sus hijos y a sus hijas y los bendijo. Luego partió y regresó a su lugar.
El criado del varón de Dios se levantó muy de ma ana y, al salir fuera, se encontró con que un fuerte ejército, con caballos y carros, rodeaba la ciudad. El criado de Eliseo le dijo: '¡Ay, se or m o! ¿Qué haremos?'.
Porque los ojos de Yahveh recorren toda la tierra para fortalecer a los que se le entregan con entero corazón. Neciamente has procedido esta vez. Por eso desde ahora habrá guerras contra ti'.
Del director. De David. Al Se or yo me acojo, ¿cómo osáis aún decirme: 'Vuela al monte como el ave?'.
Aun cuando acampara contra m una hueste, mi corazón no temer a; aun cuando arrecie contra m el combate, aun entonces confiaré.
Yo me acuesto, me duermo y me despierto, y él me responde desde su monte santo.
Desistid y sabed: Yo soy Yahveh, exaltado entre las gentes, exaltado en la tierra.
Las naciones murmuran, los reinos titubean; hace él sentir su voz: se disuelve la tierra.
A la tarde, a la ma ana, al mediod a, me lamento y suspiro, y él oirá mi voz.
Moisés dijo al pueblo: 'No temáis; quedaos tranquilos y veréis la salvación que Yahveh llevará hoy a cabo en favor vuestro; pues a los egipcios que hoy veis, ya no los volveréis a ver más.
Urdid un plan, y se deshará; decid una palabra, y no se cumplirá, porque Dios está con nosotros.
Pero en aquel d a yo te libraré - oráculo de Yahveh -, para que no seas entregado en mano de los hombres que temes.
¿O crees tú que no puedo acudir a mi Padre, que inmediatamente me enviar a más de doce legiones de ángeles?
Pero él les dice: 'Dejad ya vuestro miedo. Buscáis a Jesús, el Nazareno, el crucificado. Ha resucitado, no está aqu; éste es el lugar donde lo pusieron.
sin dejaros amedrentar en nada por los adversarios. Esto será para ellos indicio cierto de perdición y para vosotros, de salvación. Y esto procede de Dios.
Entonces Yahveh dijo a Josué: 'No temas ante ellos, porque ma ana, a esta misma hora, te los entregaré. Todos ellos serán v ctimas de la muerte delante de Israel; desjarretarás sus caballos y quemarás sus carros'.
Vosotros, hijitos, sois de Dios y los habéis vencido. Porque es mayor el que está en vosotros que el que está en el mundo.