que tus ojos permanezcan abiertos d a y noche sobre este templo, sobre este lugar del que dijiste: 'All estará mi nombre', y atiende la plegaria que tu siervo te dirige en este lugar.
2 Reyes 19:16 - Biblia Castilian 2003 Inclina, oh Yahveh, tus o dos y escucha; abre, Yahveh, tus ojos y mira. Escucha las palabras que Senaquerib ha enviado para escarnio del Dios vivo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Inclina, oh Jehová, tu oído, y oye; abre, oh Jehová, tus ojos, y mira; y oye las palabras de Senaquerib, que ha enviado a blasfemar al Dios viviente. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Inclínate, oh Señor, y escucha! ¡Abre tus ojos, oh Señor, y mira! Escucha las palabras desafiantes de Senaquerib contra el Dios viviente. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Pon atención, Yavé, óyeme, abre los ojos, Yavé, y mira! La Biblia Textual 3a Edicion Inclina tu oído, oh YHVH, y escucha; abre tus ojos, oh YHVH, y observa. Escucha las palabras que ha enviado Senaquerib para vituperar al Dios viviente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Inclina, oh Yahveh, tus oídos y escucha; abre, Yahveh, tus ojos y mira. Escucha las palabras que Senaquerib ha enviado para escarnio del Dios vivo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Inclina, oh Jehová tu oído y escucha; abre, oh Jehová, tus ojos y mira; y oye las palabras de Senaquerib, que ha enviado a blasfemar al Dios viviente. |
que tus ojos permanezcan abiertos d a y noche sobre este templo, sobre este lugar del que dijiste: 'All estará mi nombre', y atiende la plegaria que tu siervo te dirige en este lugar.
Verdaderamente, oh Yahveh, los reyes de Asiria han devastado las naciones y los pa ses,
Quizá Yahveh, tu Dios, habrá o do todas las palabras del copero mayor, enviado por el rey de Asiria, su se or, para insultar al Dios vivo, y le castigue por las palabras que Yahveh, tu Dios, ha o do. Eleva, pues, una plegaria por el resto que aún queda'.
Ahora pues, Dios m o, que tus ojos estén abiertos y tus o dos atentos a la oración que se haga en este lugar.
A ti, Se or, me acojo, que no tenga jamás que avergonzarme: por tu justicia, ponme en salvo.
Levántate, Se or, a la defensa de tu causa, recuerda los ultrajes continuos de los necios.
Devuelve a los vecinos siete veces en su seno el oprobio con que ellos, Se or, te han afrentado.
Inclina, oh Yahveh, tus o dos y escucha; abre, Yahveh, tus ojos y mira. Escucha todas las palabras que Senaquerib ha enviado para escarnio del Dios vivo.
Quizá Yahveh, tu Dios, habrá o do las palabras del copero mayor, enviado por el rey de Asiria, su se or, para insultar al Dios vivo, y le castigue por las palabras que Yahveh, tu Dios, ha o do. Eleva, pues, una plegaria por el resto que aún queda'.
Inclina tu o do, Dios m o, y escucha. Abre tus ojos y mira nuestras ruinas y la ciudad sobre la cual se invoca tu nombre; pues no te presentamos nuestras súplicas confiando en nuestras buenas obras sino en tus grandes misericordias.
y considerando el oprobio de Cristo como riqueza mayor que los tesoros de Egipto, pues ten a la mirada puesta en la recompensa.