Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




2 Reyes 1:15 - Biblia Castilian 2003

Dijo entonces el ángel de Yahveh a El as: 'Baja con él y no le tengas miedo'. Se levantó, pues, y bajó adonde estaba el rey.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Entonces el ángel de Jehová dijo a Elías: Desciende con él; no tengas miedo de él. Y él se levantó, y descendió con él al rey.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces el ángel del Señor dijo a Elías: «Desciende con él y no le tengas miedo». Así que Elías se levantó y fue con el capitán a ver al rey.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Entonces el ángel de Yavé dijo a Elías: 'Baja con él, pues nada tienes que temer de su parte'. Se levantó pues y bajó con ellos hasta donde estaba el rey.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces el ángel° de YHVH dijo a Elías: Baja con él, no tengas temor de su rostro.° Y se levantó y bajó con él al rey.

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Dijo entonces el ángel de Yahveh a Elías: 'Baja con él y no le tengas miedo'. Se levantó, pues, y bajó adonde estaba el rey.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces el ángel de Jehová dijo a Elías: Desciende con él; no tengas miedo de él. Y él se levantó, y descendió con él al rey.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



2 Reyes 1:15
11 Referans Kwoze  

Después de estos sucesos, Yahveh dirigió la palabra a Abrán en una visión, diciéndole: 'No temas, Abrán. Yo soy tu escudo; tu recompensa será muy grande'.


Entonces exclamó El as: '¡Por vida de Yahveh Sebaot, a quien sirvo! Hoy mismo me voy a presentar delante de él'.


Ya ves que ha bajado fuego del cielo y ha devorado a los dos primeros jefes de cincuenta con sus cincuenta hombres. ¡Que ahora mi vida tenga algún valor a tus ojos!'.


Pero el ángel de Yahveh dijo a El as el tesbita: 'Ve y sube al encuentro de los mensajeros del rey de Samar a, y diles: '¿Acaso no hay Dios en Israel y por eso vais a consultar a Baal - Zebub, dios de Ecrón?'.


De David. El Se or es mi luz y mi socorro, ¿de quién he de temer? El Se or es el alcázar de mi vida, ¿de quién he de temblar?


Yo, yo soy quien os consuela. ¿Quién eres tú para que temas al hombre que muere, al hijo de hombre que como hierba es tratado?


As pues, c ete la cintura, levántate y diles todo lo que te mando. No tengas miedo ante ellos, no sea que yo te haga temerlos.


Pues te pongo frente a este pueblo como muro de bronce inquebrantable: te combatirán, pero no te podrán; pues contigo estoy yo para salvarte y librarte - oráculo de Yahveh -.


En cuanto a ti, hijo de hombre, no los temas, ni temas tampoco sus palabras, aunque sean para ti cardos y espinas y tengas que vivir entre escorpiones; no temas sus palabras ni te desanimes por causa de ellos, pues son una raza rebelde.


No tengáis miedo a los que matan el cuerpo; que al alma no pueden matarla. Temed más bien a quien tiene poder para hacer que perezcan cuerpo y alma en la gehenna.


Por la fe dejó Egipto, sin dejarse atemorizar por la ira del rey, ya que se mantuvo en su resolución como quien ve a al Invisible.