Ajisar, mayordomo de palacio; Adonirán, hijo de Abdá, supervisor de las prestaciones personales.
2 Crónicas 8:8 - Biblia Castilian 2003 o sea, a aquellos de sus descendientes que hab an quedado en el pa s y no hab an sido aniquilados por los israelitas, los sometió Salomón a prestación personal hasta el d a de hoy. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 los hijos de los que habían quedado en la tierra después de ellos, a los cuales los hijos de Israel no destruyeron del todo, hizo Salomón tributarios hasta hoy. Biblia Nueva Traducción Viviente Todos ellos eran descendientes de las naciones que el pueblo de Israel no había destruido. Entonces Salomón los obligó a ser parte de sus trabajadores y hasta el día de hoy son trabajadores forzados; Biblia Católica (Latinoamericana) cuyos descendientes habían quedado después de ellos en el país y a los que los israelitas no habían exterminado, Salomón los sometió a servidumbre que dura hasta el día de hoy. La Biblia Textual 3a Edicion cuyos descendientes habían quedado en la tierra después de ellos, a los cuales los hijos de Israel no habían expulsado totalmente, Salomón hizo una recluta, y los sometió a trabajos forzados hasta hoy. Biblia Serafín de Ausejo 1975 o sea, a aquellos de sus descendientes que habían quedado en el país y no habían sido aniquilados por los israelitas, los sometió Salomón a prestación personal hasta el día de hoy. Biblia Reina Valera Gómez (2023) los hijos de los que habían quedado en la tierra después de ellos, a los cuales los hijos de Israel no destruyeron del todo, hizo Salomón tributarios hasta hoy. |
Ajisar, mayordomo de palacio; Adonirán, hijo de Abdá, supervisor de las prestaciones personales.
Al cabo de veinte a os, durante los cuales construyó Salomón las dos casas - el templo de Yahveh y el palacio real -,
cuyos descendientes hab an quedado después de ellos en el pa s porque los israelitas no hab an podido entregarlos al anatema, los obligó Salomón a prestación personal servil hasta el d a de hoy.
Salomón hizo el censo de todos los extranjeros que hab a en el pa s de Israel a la manera del censo que hab a hecho su padre David, y se halló que hab a ciento cincuenta y tres mil seiscientos.
En cambio, a los israelitas no los empleó en trabajos serviles, sino como guerreros, jefes y oficiales, jefes de sus carros y de su caballer a.
Pero no pudieron expulsar a los cananeos que habitaban en Guézer y que continúan habitando en medio de Efra n hasta el d a de hoy, si bien sometidos a servidumbre.
Cuando los israelitas se hicieron fuertes, sometieron a servidumbre a los cananeos, pero de hecho no los expulsaron.