Al d a siguiente ofrecieron sacrificios y holocaustos a Yahveh: mil novillos, mil carneros, mil corderos, con sus libaciones, y otros muchos sacrificios, por todo Israel.
2 Crónicas 7:5 - Biblia Castilian 2003 El rey Salomón ofreció un sacrificio de veintidós mil bueyes y de ciento veinte mil ovejas. As inauguraron el rey y todo el pueblo el templo de Dios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y ofreció el rey Salomón en sacrificio veintidós mil bueyes, y ciento veinte mil ovejas; y así dedicaron la casa de Dios el rey y todo el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente El rey Salomón ofreció un sacrificio de veintidós mil cabezas de ganado y ciento veinte mil ovejas y cabras. Así el rey y todo el pueblo dedicaron el templo de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey Salomón ofreció en sacrificio veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas.
Ese día el rey y todo el pueblo inauguraron la Casa de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y el rey Salomón ofreció en sacrificio veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. Así el rey y todo el pueblo dedicaron la Casa de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El rey Salomón ofreció un sacrificio de veintidós mil bueyes y de ciento veinte mil ovejas. Así inauguraron el rey y todo el pueblo el templo de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ofreció el rey Salomón en sacrificio veintidós mil bueyes, y ciento veinte mil ovejas; y así dedicaron la casa de Dios el rey y todo el pueblo. |
Al d a siguiente ofrecieron sacrificios y holocaustos a Yahveh: mil novillos, mil carneros, mil corderos, con sus libaciones, y otros muchos sacrificios, por todo Israel.
Subió, pues, Salomón all, ante Yahveh, al altar de bronce, que estaba ante Yahveh junto a la tienda del encuentro, y ofreció sobre él mil holocaustos.
Aquel d a sacrificaron a Yahveh, del bot n que hab an tra do, setecientas reses de ganado mayor y siete mil de ganado menor.
El templo que voy a construir ha de ser grande, porque nuestro Dios es más grande que todos los dioses.
porque Ezequ as, rey de Judá, hab a reservado para la asamblea mil novillos y siete mil ovejas; y los jefes, por su parte, hab an dado a la asamblea mil novillos y siete mil ovejas; y, además, muchos sacerdotes estaban ya purificados.
El rey Salomón, acompa ado de toda la asamblea de Israel que hab a acudido junto a él delante del arca, sacrificaban ganado menor y mayor en tal cantidad que no se pod a contar ni calcular.
Los sacerdotes atend an de pie a su ministerio, mientras los levitas, al son de los instrumentos músicos de Yahveh que hab a hecho el rey David para alabar a Yahveh - porque es eterna su misericordia -, entonaban las alabanzas compuestas por David. Los sacerdotes, frente a ellos, tocaban las trompetas. Y todo Israel estaba de pie.
Pero al pr ncipe le incumbirán los holocaustos, la oblación y la libación en las fiestas, novilunios y sábados y en todas las solemnidades de la casa de Israel. Él aportará lo necesario para el sacrificio por el pecado, para la oblación, el holocausto y el sacrificio de comunión, para la expiación de la casa de Israel.'
¿Querrá, acaso, Yahveh millares de carneros, mir adas de torrentes de aceite? ¿Entregaré a mi primogénito por mi rebeld a al fruto de mis entra as por mi personal pecado?'
Los pr ncipes hicieron su ofrenda para la dedicación del altar. El d a en que fue ungido le presentaron sus ofrendas.
Se celebraba entonces en Jerusalén la fiesta de la Dedicación. Era invierno.