También en Jerusalén estableció Josafat a algunos de los levitas, de los sacerdotes y de los jefes de las casas paternas de Israel para administrar la justicia de Yahveh y para dirimir los litigios. Éstos resid an en Jerusalén.
2 Crónicas 19:5 - Biblia Castilian 2003 Estableció, además, jueces en el pa s, en todas las ciudades fortificadas de Judá, en cada ciudad. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y puso jueces en todas las ciudades fortificadas de Judá, por todos los lugares. Biblia Nueva Traducción Viviente Nombró jueces en las ciudades fortificadas por toda la nación Biblia Católica (Latinoamericana) Estableció jueces en todo el país, en todas y cada una de las ciudades amuralladas de Judá, La Biblia Textual 3a Edicion Y estableció jueces en cada una de las ciudades fortificadas del territorio de Judá; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Estableció, además, jueces en el país, en todas las ciudades fortificadas de Judá, en cada ciudad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y puso jueces en la tierra, en todas las ciudades fortificadas de Judá, por todas las ciudades. |
También en Jerusalén estableció Josafat a algunos de los levitas, de los sacerdotes y de los jefes de las casas paternas de Israel para administrar la justicia de Yahveh y para dirimir los litigios. Éstos resid an en Jerusalén.
Pero elige de entre todo el pueblo hombres de valer, temerosos de Dios, hombres fieles, que aborrezcan la ganancia injusta, y ponlos al frente de ellos como jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez;
Se tomarán otras piedras, que se colocarán en lugar de las que fueron quitadas; luego la casa se encalará de nuevo.
Habéis o do que se dijo a los antiguos: No matarás, y quien mate comparecerá ante el tribunal.
Pero yo os digo: todo el que se enoje contra su hermano comparecerá ante el tribunal; y el que diga a su hermano estúpido comparecerá ante el sanedr n; y el que le diga renegado comparecerá para la gehenna del fuego.
En el juicio no consideraréis las personas, sino que escucharéis lo mismo al peque o que al grande, no temeréis a nadie, porque el juicio es de Dios. La causa que os parezca demasiado dif cil, traédmela a m y yo la resolveré'.